Tres innovaciones chilenas que buscan reemplazar el uso de combustibles fósiles en industrias
Reactor que genera energía térmica con aceite usado y agua, amoniaco con hidrógeno verde para tronaduras y tecnología solar híbrida con espejos para procesos industriales, son parte de los proyectos que buscan disminuir las emisiones.
- T+
- T-
La participación de Chile en la Cumbre del Clima (COP25), la nueva meta de reducción de emisiones de 30% a 2030 y el establecimiento de la carbono neutralidad a 2050 están acelerando la investigación y desarrollo de proyectos que contribuyan a combatir el avance del cambio climático.
En este contexto, tres innovaciones chilenas, Aqua Reactor, Green Ammonia y Ulisses, buscan reemplazar el uso de combustibles fósiles como carbón, petróleo y gas natural -principales responsables de la emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI) a la atmósfera- en procesos industriales y mineros.
Energía térmica desde el agua
"Hemos aprendido a obtener energía del agua. Invertimos la función de lo que estaba hecho para apagar el fuego. Hoy es al revés". Así define el ingeniero de la Universidad Católica de Valparaíso y Gerente General de Asfalcom, Julio Araya, al Aqua Reactor, que "nació de casualidad" por querer disminuir los índices de CO2 de su empresa dedicada al rubro asfáltico.
Araya explica que el Aqua Reactor es similar a un quemador de petróleo, que genera energía térmica con aceite usado industrial o de autos -a partir de 5 mil kilómetros- y agua dulce o de mar. A través de un proceso de termólisis en que tanto el agua como el aceite se calientan y se transforman en vapor y gas, respectivamente, se mezclan y crean un gas de síntesis, el que se quema a 1.000 grados, generando energía. "Las emisiones de C02 que alcanzan sólo un 2,2%, muy por debajo del 12% permitido para las quemas de petróleo", afirma.
Señala que el reactor puede ser usado en diversos procesos industriales como plantas asfálticas, productoras de cemento, plantas secadoras de frutas, generadoras de electricidad e incluso en calderas de edificios.
La mezcla utilizada ya fue aprobada por la Dirección de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la Pontificia Universidad Católica de Chile (Dictuc) y sus emisiones, por la empresa de monitoreo y gestión ambiental, Aeeg Emissions.
Amoniaco para tronaduras producido con hidrógeno verde
El hidrógeno verde -generado a partir de agua tras un proceso de electrolisis- es el combustible limpio que suena como una de las grandes oportunidades del país en el marco de una reactivación sostenible. En este contexto, Enaex y Engie están realizando las pruebas de prefactibilidad para la generación de amoniaco y posteriormente, nitrato de amonio, uno de los agentes utilizados en las tronaduras mineras.
Pablo Wallach, vicepresidente de Transformación Digital de Enaex, explica que el amoniaco se crea en base a gas natural y, como Chile no lo produce, deben importarlo. "En un año promedio, se importan como 350 mil toneladas de amoniaco, lo que se traduce en una huella de carbono equivalente de 750 mil toneladas de CO2", afirma.
El ejecutivo precisa que el amoniaco se hace específicamente del hidrógeno que se captura del gas, por lo tanto, "también se puede hacer desde el agua, es decir, con hidrógeno verde", dice.
Esta alternativa, además de ser limpia, podría abrir un nuevo mercado de exportación para Chile, dice Wallach, ya que a partir del amoniaco, también se generan fertilizantes que hoy se importan.
"Si tuviéramos amoniaco, seríamos capaces de fabricar fertilizantes verdes que no vienen del amoniaco del gas, sino del hidrógeno verde. O sea, del agua y del sol (...) Podríamos generar una nueva industria", afirma Wallach.
Tecnología solar híbrida con espejos
La empresa de soluciones energéticas Aiguasol, de la mano de Codelco, dio vida a Ulisses, un proyecto de tecnología solar para el calentamiento de fluidos industriales que necesiten temperaturas específicamente bajas.
El gerente del proyecto, Alfredo González, comenta que los captadores solares térmicos son bastante comunes, sin embargo, "la innovación está en el desarrollo de una solución híbrida: una mezcla de energía solar térmica, pero también con tecnologías de concentración".
La tecnología híbrida utiliza espejos reflectores que rotan según el movimiento del sol, para así generar mayor energía en menor superficie. "Esto permite llegar a temperaturas más altas con mayor eficiencia. Además, los reflectores pueden acoplarse a cualquier captador convencional, lo que en costos es bastante menor en comparación a instalar más paneles", señala González.
El proyecto Ulisses -que ha recibido apoyo del Comité Solar e Innovación Energética de Corfo- permite alcanzar temperaturas entre 20 y 120 grados Celsius y actúan en reemplazo de "buena parte" del petróleo utilizado en calderas. "Se puede lograr un ahorro hasta un 80% del petróleo, lo que significa una reducción del mismo porcentaje en emisiones de carbono a la atmósfera", sostiene el ejecutivo.