El presidente de Iberia, Antonio Vázquez,
expresó hoy su "convencimiento absoluto" de que la compañía no
tendrá que usar su veto a la fusión con British Airways (BA) si ésta
no resuelve satisfactoriamente el déficit de sus fondos de pensiones
de más de 3.000 millones de euros (US$ 4.465,5 millones).
El preacuerdo al que llegaron la víspera Iberia y BA sobre su
fusión, que se materializará dentro de un año, incluye una cláusula
que otorga a la española el derecho a resolver el contrato en caso
de que BA no llegara a una solución "razonablemente satisfactoria"
con los administradores de sus fondos de pensiones.
En declaraciones a Efe, Vázquez señaló hoy que dicha cláusula "se
ha puesto para tranquilidad de los accionistas de Iberia", que en
este momento desconocen cuál va a ser el resultado final de esa
negociación".
La cláusula se incluyó para que "exista la tranquilidad absoluta"
de que, si el resultado final sobre las pensiones de BA no es
satisfactorio, Iberia "pueda desistir de la operación", insistió
Vázquez, quien agregó que fue incorporada de "mutuo acuerdo y de muy
buen grado".
No obstante, confió en que Iberia no tenga hacer uso de ella, ya
que los gestores de British Airways llevarán "de una manera
espléndida para el futuro de las dos compañías combinadas" la
negociación con los administradores de los fondos de pensiones.
La fusión "no sólo nos lleva a ser más grandes", sino "lo que
garantiza es la permanencia de Iberia y la de BA en la primera
división de las aerolíneas mundiales", aseguró.
Además, "potencia una capacidad de liderazgo para estar en el
tope del crecimiento, incluso de la futura consolidación en la
industria de las aerolíneas mundiales".