Analistas son cautelosos ante el efecto que tendrá el nuevo presidente en los mercados

POR FRANCISCA ACEVEDO O.

Las expectativas de un mayor estímulo fiscal en Estados Unidos y los buenos resultados de las compañías impulsaron ayer a las acciones. El índice Dow jones subió 0,38% y el S&P 500 ganó 0,81%.

“Los mercados se están beneficiando por el inicio del proceso de vacunación, la alta liquidez en los mercados y las expectativas en torno a mayores estímulos fiscales”, dice Cristóbal Doberti, Gerente Regional de Estrategias de Ahorro e Inversión de SURA Asset Management.

“Esperamos que la renta variable estadounidense se beneficie de un estímulo fiscal y monetario sin precedentes y de un impulso económico superior al promedio. El control demócrata del Congreso incrementa la probabilidad de nuevos estímulos”, señala Esteban Polidura, director de Asesoría para las Américas de Julius Baer.

Aún así, una visión más cautelosa se está instalando en Wall Street. Los precios de los activos ya reflejan un shock de gasto público y los estímulos de la Fed ya no pueden ser mucho mayores de aquí en adelante, advierte Bank of America.

El director ejecutivo de BlackRock, Larry Fink, dijo a Barron’s que, si bien cree que la base del mercado sigue siendo sólida, espera una corrección de 5% a 10% en el transcurso del año. Por su parte, el estratega jefe de mercado de Canaccord Genuity, Tony Dwyer, espera un movimiento a la baja de un 8% en el S&P 500 en el corto plazo.

Uno de los factores que podría desalentar al mercado es el alza de impuestos que el mandatario electo puso sobre la mesa. “La experiencia en Chile con Bachelet y Trump en EEUU demuestra que cuando los presidentes proponen en su programa de gobierno aumento de impuestos lo cumplen. Eso no está en precios y va a provocar un descalabro en mercados emergentes por la búsqueda de refugio”, advierteel Chief Investment Officer & Partner South Lakes Investment, Nicolás Bernal.

Pero la estratega de mercado nacional e internacional de Nevasa, María Luz Muñoz, pone paños fríos. “Los aumentos de impuestos claramente no serían buenas noticias para las empresas, pero esta victoria tan ajustada hace muy probable que el alza no sea tan fuerte”, dice.

“Sinceramente, no vemos que Biden se ‘dispare en los pies’ y termine anulando los estímulos impulsados por él mismo”, afirma.