Desde Puerto Varas, donde participa en la tercera Reunión de Altos Representantes (SOM 3) y reuniones relacionadas de APEC, el empresario Eduardo Chadwick advirtió que estamos ante una tormenta perfecta.
“Si sumamos, los elementos de esta tormenta son los disturbios en Hong Kong -que es la puerta de entrada al mercado asiático-, el Brexit en Inglaterra, la guerra comercial entre Donald Trump y Xi Jinping y la recesión global”, afirmó el presidente de Viña Errázuriz, quien es miembro alterno del Consejo Asesor Empresarial de APEC (ABAC), en conversación con DF.
Para enfrentarla, recomendó perspectiva y tomar medidas empresariales de largo plazo, como austeridad, creación de marca y control del negocio, intentando bajar costos o aumentando las eficiencias. Su meta para este año, en que Chile es anfitrión del encuentro de 21 economías del Asia-Pacífico, es que los líderes logren firmar un acuerdo en noviembre, lo que no pasó el año pasado en Papúa Nueva Guinea.
- ¿La guerra comercial ha sido parte de las discusiones?
- Sí, la promoción del libre comercio y la rebaja de las tarifas arancelarias y paraarancelarias. Ese es un tema que consideramos que es fundamental para todas las economías. Chile ha liderado como país el desarrollo de tratados de libre comercio. Hoy día el mundo está amenazado por la guerra comercial entre Estados Unidos y China. A lo largo de todo el año hemos dado una opinión muy fuerte y una recomendación de trabajar en mitigar estos efectos, o lograr que las economías se pongan de acuerdo. Es de esperar que a noviembre podamos tener buenas noticias y la tensión de esta guerra comercial haya podido aminorarse o resolverse. No está en nuestras manos, pero tanto la APEC como los miembros de ABAC hacemos las recomendaciones al respecto.
La seguridad alimentaria fue uno de los temas que se discutieron ayer en Puerto Varas.
- ¿Cree que este foro sirve para acercar posiciones dado que EEUU y China pertenecen a APEC?
- Sirve muchísimo, porque justamente son estos encuentros formales e informales -no a nivel de los ministros de Estado o cancilleres, los que tienen que jugar un rol a veces más político- en donde se hablan los temas que realmente le importan a la población, que traen progreso y desarrollo, y se puede hablar sin esa presión mediática que muchas veces tienen los políticos. Por lo tanto sirve muchísimo como plataforma para discutir francamente que más involucran a las diferentes economías.
- En la última reunión de los ABAC en Huangzhou, ¿cuáles fueron las posiciones que plantearon tanto China como EEUU?
- Están de acuerdo en hablar de estos temas, pero cuando llega el momento de proponer políticas más concretas, ahí se ve que hay algunas economías, como EEUU, que no son capaces de comprometerse completamente. Está la voluntad, pero muchas veces falta la fuerza de ese compromiso. Pero por lo menos hay un camino, que sin duda que es positivo.
- ¿Cómo ha afectado a Viña Errázuriz la guerra comercial?
- Los mercados internacionales están con nerviosismo e inestabilidad, y eso hace que haya decisiones de bajar los stock, de compras más restringidas, hace que todas las economías del mundo estén a la espera con ansiedad. Hay menos inversiones y el comercio se hace más lento. Yo estuve hace un mes en China y sin duda que esto ha afectado. Vemos que las exportaciones de Chile globales y también de vinos están estancadas, incluso algunas de ellas a la baja.
Lo que estamos haciendo es activar con mayor energía estar muy cerca de los mercados, hay un trabajo de largo plazo que es desarrollar las marcas. Como empresa, hemos reforzado todo el trabajo comercial. Creo que hace mucho tiempo que no viajaba tanto por todo el mundo. He estado en China dos, tres veces, en Europa, nuestro equipo comercial ha estado muy activo activando las marcas y también con una perspectiva muy austera respecto a los costos. Acá hay que ser muy conciente de que la situación mundial está difícil, no sabemos cuánto tiempo esto va a durar.
Énfasis en sustentabilidad
Errázuriz compartió además cuáles son las prioridades de los ABAC este año. “Hay una serie de temas que nosotros recomendamos privilegiar o poner el énfasis. El primero es el crecimiento inclusivo, tratar de hacer crecer más a las mujeres, y el desarrollo de las zonas rurales”, explicó.
El segundo eje es “desarrollar es la economía digital, incorporar tecnología a los campos y las zonas rurales de Chile y de las economías de la APEC”. Otro punto es “compartir experiencias de desarrollo de las distintas economías” para conocer las mejores prácticas a nivel gubernamental, pero también entre privados. El cuarto énfasis es la sustentabilidad y las economías circulares.
- ¿Cuáles son las preocupaciones del empresariado respecto de la seguridad alimentaria?
- Este es un tema fundamental. La seguridad alimentaria es el tema que vimos hoy y lo que hemos tratado de discutir es cómo, a través de iniciativas como la economía digital, se puede asegurar la trazabilidad en la producción de los alimentos, cómo se puede tener mayor precisión en las mediciones en las diferentes etapas de la producción, cómo nos hacemos cargo de los elementos que salen de estos procesos para hacer procesos sustentables.
- Esto también está marcado por el cambio climático...
- Sin duda. Uno de los aspectos bajo el cual se analizan estos diferentes ejes es el cambio climático, que acelera la necesidad de desarrollar la sustentabilidad en muchas de las áreas. El cambio climático acelera aún más poder llegar a un acuerdo sobre la neutralidad de las emisiones de carbono. Todavía estamos lejos, pero Chile ya tiene un compromiso al 2035 de reducir las emisiones de carbono. Hay muchos países que ya tienen declaradas sus intenciones. Faltan las economías más importantes, pero en el fondo estas reuniones previas hacen que en la cumbre de noviembre los ABAC hayan desarrollado un diálogo con los líderes en que les transmiten todas estas recomendaciones para las mejores políticas.
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