La inflación total pareciera haber dejado de ser un problema, en medio del estado recesivo en que se encuentra la economía como consecuencia de las medidas de aislamiento para contener el coronavirus.
En junio, los precios locales anotaron una caída de 0,1%, ubicándose por debajo de lo esperado. En los últimos 12 meses, acumulan un 2,6%, alejándose de la parte media del rango de tolerancia del Banco Central (3%).
Si bien el escenario consolida un período de inflación contenida en el país, hay vaivenes de corto plazo. Así lo revelan los precios incorporados en el mercado financiero, que han exhibido alzas en sus expectativas para el IPC del mes de julio.
El 6 de este mes, el mercado proyectaba una caída de la inflación total de cerca de 0,1% en el período. Sin embargo, a partir de mediados del mes las proyecciones comenzaron a aumentar y hoy se ubican entre 0,02% y 0,04%.
En cambio, hacia los próximos meses el escenario es algo más difuso: las perspectivas para agosto pasaron de una inflación mensual de 0,1% a cerca de 0%, mientras que para septiembre aumentaron desde 0,14% a 0,17%.
En Scotiabank explican que entre los factores que impulsarán al alza el índice estarán el transporte interurbano y los arriendos, compensados a la baja por los peajes y los combustibles. Su pronóstico total oscila entre -0,1% y 0%.
"Agosto sería el último mes en que veríamos una caída en combustibles, las que serían contrarrestadas por alzas en la división de alimentos, y la paulatina presión al alza en servicios, a medida que la economía se empieza a reabrir", puntualizan.
La economista jefe de Banchile Inversiones, Carolina Grünwald, asegura que si bien pasar de una caída de IPC a una variación cercana a 0,1% es "poca diferencia", sí advierte que durante el mes se ha visto un aumento en los precios de los alimentos que podrían explicar el cambio en las perspectivas.
"Con el comienzo del desconfinamiento, hay precios que van a dejar de tener variación cero por no poder tomarlos en cuarentena, sobre todo los ligado a servicios", señala, anticipando un cierre del año de 2,2% en el IPC general.
¿Cierre bajo el 2%?
El economista jefe de BTG Pactual Chile, Pablo Cruz, espera que los precios internos varíen entre 0% y 0,1% este mes y el próximo, enfatizando que las mayores perspectivas de corto plazo no se relacionan con el alza en el valor de las cuentas de algunos servicios básicos, como la luz. Por lo mismo, espera un cierre de 1,8% para la inflación total.
"Dado el aumento en la cantidad de energía consumida (no en el precio), las cuentas de la luz son mayores. Desde el punto de vista inflacionario, el precio de la electricidad no ha aumentado, por lo que su variación mensual se mantiene en 0% desde comienzos de año", recalca.
Similar diagnóstico tiene el analista de precios de Pacífico Research, Francisco Sepúlveda, mientras que el subgerente de Estudios de Econsult, Mauricio Carrasco, se abre a un escenario con un cierre de año de 1,5% de IPC acumulado, donde julio y agosto registrarán variaciones cercanas a 0%.
Precios más altos por segmento
En junio, la inflación total tuvo un comportamiento dispar al medirse por niveles de ingresos. Por una parte, Clapes UC estimó que el IPC del adulto mayor anotó una caída de 0,1%, mientras que el registro para el mismo segmento pero más vulnerable mostró un avance de 0,3% en el lapso. En el último año, el índice para los adultos mayores de menores ingresos acumula un incremento de 3,4%, superior al IPC del adulto mayor (2,8%) y el índice general (2,6%).
"En el segundo trimestre del año se observa que el IPC del adulto mayor vulnerable experimentó la mayor alza de las tres canastas representativas. Esto se debe a la mayor ponderación que tiene dentro de su canasta los productos alimenticios y bebidas no alcohólicas, los cuales experimentaron alzas principalmente en el mes de mayo y junio", explica el centro de estudios.
En el sexto mes del año en específico, el IPC del adulto mayor anotó una variación mensual de -0,1%, acumulando 1,1% en lo que va del año. Seis de las divisiones presentan incidencias positivas y seis negativas. Al igual que en el IPC general las divisiones que destacan por su incidencia a la baja son transporte (-0,083 pp) y salud (-0,057 pp), mientras que la división con mayor incidencia positiva es alimentos y bebidas no alcohólicas (0,051 pp).
En tanto que el IPC para el adulto mayor vulnerable anotó una variación mensual de 0,1% en junio, acumulando 1,8% en el año. En el mes, siete de las doce divisiones inciden negativamente en la variación mensual, aunque la suma de las incidencias de esas divisiones no supera la incidencia conjunta de las cinco divisiones que registraron una variación mensual positiva. Destacan la incidencia positiva de alimentos y bebidas no alcohólicas (0,102 pp) y la incidencia negativa en la división de transporte (-0,038 pp).
En tanto, un reporte del Centro de Estudios en Economía y Negocios (CEEN) de la U. del Desarrollo reveló que la inflación fue más alta para el quintil de menores ingresos en el país, que registró un IPC de 0% en el mes y de 3% en el último año, mientras que para el quintil más rico (el número 5) fue un -0,1% y 1,4%, respectivamente.
"Los precios de los bienes y servicios más importantes para el 20% de hogares de menores ingresos presentaron las siguientes variaciones: Alimentos y Bebidas No Alcohólicas 0,3%; Vivienda y Servicios Básicos 0,2%; y Transporte, -0,7%", explicó el CEEN.
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