El paquete de estímulo fiscal
del presidente estadounidense, Barack Obama, "va a tener impactos en
América Latina, algunos preocupantes, como el 'Buy Américan'",
advirtió hoy la secretaria ejecutiva de la Cepal, la mexicana Alicia
Bárcena.
La inclusión de esta cláusula, que incentiva la compra de acero
estadounidense, es uno de los aspectos más controvertidos del
programa económico por valor de US$ 787.000 millones, ya que
los principales socios comerciales de Estados Unidos lo consideran
una medida proteccionista.
En un encuentro que sostuvo con la prensa, la secretaria afirmó
este lunes que el paquete de estímulo económico de Barack Obama
afectará a América Latina, ya que busca reducir la dependencia
energética de Estados Unidos y fortalecer la productividad en el
sector manufacturero local, entre otras metas.
Recuperación
La crisis económica mundial "está tocando fondo" en el plano
financiero gracias a las medidas para un "control rápido y eficaz"
de la situación adoptadas por Estados Unidos y los principales
países europeos, destacó Bárcena.
Sin embargo, "la recuperación social no será tan rápida como la
económica", sobre todo por la caída de la demanda y el aumento del
desempleo, advirtió la responsable de la Cepal.
El indicador más preocupante es el empleo, porque Latinoamérica
pasará de un 7,6% de desocupación en 2008 a un 11% este año.
La región está mejor preparada que en el pasado para enfrentar la
crisis económica y financiera mundial; los gobiernos están poniendo
en marcha políticas contracíclicas.
Situación latinoamericana
La bonanza de los últimos años trajo consigo un aumento de los
precios y un crecimiento de la demanda, y también aportó nuevos
elementos, como la acumulación de reservas y la precaución por la
reducción del endeudamiento público.
Pero las exportaciones de América Latina han caído y los términos
de intercambio han empeorado, además de que las condiciones para
acceder a la financiación son más exigentes y hay un deterioro
generalizado del mercado de trabajo, el consumo y la inversión,
advierten los expertos de la Cepal.
Uno de los efectos de la crisis más visible es la reducción de
las divisas que envían los emigrantes latinoamericanos que trabajan
en Estados Unidos y en Europa.
La depreciación de las monedas locales con respecto al dólar está
amortiguando el impacto en la economía de las familias, pero la
situación puede agravarse si se produce un retorno masivo de
emigrantes a sus países de origen.
A lo largo de 2009, la Cepal le estará tomando el pulso a la
región con la publicación mensual de un informe sobre las medidas de
política económica que están adoptando los gobiernos de la región.
Además, el organismo dependiente de Naciones Unidas comparará la
evolución de la actual crisis económica con otras siete del pasado,
con el fin de averiguar en qué aspectos hay un cambio definitivo del
modelo.
La secretaria ejecutiva de la Cepal llamó hoy la atención sobre
el hecho de que el deterioro de la economía mundial se desencadenara
a raíz del impago de los préstamos de alto riesgo ("subprime"), que
sólo afectaba a un 20% del mercado hipotecario de Estados
Unidos.
Lo paradójico -comentó- es que un agujero financiero de US$ 250.000
millones está obligando al gobierno estadounidense a
aplicar un plan que equivale a todo el Producto Interno Bruto (PIB)
de Brasil.
Pero la crisis también está teniendo consecuencias positivas,
como que los gobiernos orienten el gasto público hacia proyectos de
infraestructura, lo que según la Cepal demuestra que ahora "el
sector real es el que manda" sobre la economía.
Y previsiblemente también transformará algunos paradigmas
económicos, como el modelo de producción y consumo que funcionaba
hasta ahora y la confianza en el uso del patrón dólar.
Otro de estos cambios será la desaparición definitiva de la banca
de inversión, "que hizo que el mundo creyera que era más rico de lo
que es", sentenció Alicia Bárcena.