Juan Antonio Coloma: “En el tema presidencial, la UDI está en una encrucijada que es real”
En medio de la avalancha presidencial, el ex timonel asegura que no está en sus planes postular a La Moneda y que espera que el pacto se cuadre tras una figura que concite adhesión ciudadana.
- T+
- T-
Encabezó la UDI por dos períodos consecutivos y dice que no está disponible para otro intento. En conversación con DF, el senador Juan Antonio Coloma recuerda que hace ocho años la llamada Comisión Meller, conformada por la primera administración de la presidenta Michelle Bachelet, daba cuenta de "un proceso, como ellos definían, pro productividad" y que, ahora, "es bien paradójico, veo el mismo gobierno, el mismo desafío y una solución completamente distinta".
Para el senador gremialista, integrante de la Comisión de Hacienda, lo preocupante del proyecto del gobierno en materia laboral es que "es el intento de hacer un país nuevo y eso es un tremendo error". De ahí que defienda el rechazo de la derecha a la idea de legislar la semana pasada.
- ¿Cómo cree que percibe la gente el rechazo de la derecha a la idea de legislar en la reforma laboral?
- Yo fui elegido para actuar conforme a mi conciencia y no puedo aprobar algo que creo que le va a hacer mal a Chile. Lo que me sorprende es que hay una inmensa mayoría de chilenos que la rechaza.
- ¿Es popular rechazar?
- No me importa que mi voto sea impopular. Es mucho mejor votar cosas populares, pero nunca me ha importado mucho ser impopular, pero aquí hay un tema de principios. Curiosamente, hay una sintonía creciente entre el rechazo de la gente y la postura de la oposición. Y eso es bien sintomático porque no había ocurrido en mucho tiempo.
- ¿Por qué no capitalizan eso?
- Cuando Roberto Méndez expuso en el Consejo Directivo anotó que por primera vez en la evolución de las encuestas, después de mucho tiempo, hay más gente que se siente de oposición que de gobierno.
- Pero no se identifica con la Alianza.
- No digo que sea de la Alianza. El cuadro del gobierno es a la baja permanente, pero si antes se preguntaba '¿usted es opositor?' la respuesta era no. Ahora surgió una oposición, algo está cambiando. Como crítica interna, a nosotros nos ha faltado mostrar con más nitidez la alternativa en cada una de las reformas.
- ¿Cómo se hace eso?
- Eso tiene que ver con instalar más temprano que tarde un programa de gobierno, con una ventaja que, yo por lo menos, creo que es importante y que no me habría imaginado que iba a existir en tan poco tiempo: haber sido parte del gobierno anterior, lejos de ser un hándicap en contra -como pudo ser los primeros meses de este gobierno-, hoy es una ventaja. Nos ha faltado poder graficar una alternativa que muestre que no es necesario seguir en esta decadencia.
- ¿No será muy adelantado?
- Hay que pensar en un programa de gobierno desde ya. Si hay algo que aprendimos es que gobernar es harto más difícil de lo que uno cree. Y nuestros primeros años de gobierno fueron mucho menos productivos que los últimos. Entonces, creo que es mucho mejor anticiparse.
- ¿Siente también que se desató la carrera presidencial?
- Espero que no, aunque sospecho que sí. Creo que es inevitable, porque los primeros pasos los ha dado la Nueva Mayoría: la aparición de Lagos, el intento de reposicionamiento de Marco Enríquez, la instalación de Isabel Allende, todo con una lógica presidencial. Los que están en la Nueva Mayoría son los más conscientes de que están en una mala situación y por eso están tratando de desdibujar su mala evaluación chuteando el tema dos años más.
- ¿Cómo así?
- Como para tratar de dar la idea que a partir de ahí se van a buscar las soluciones. La Nueva Mayoría es una coalición que ya amortizó este gobierno, lo tiró a pérdida.
- ¿Se instaló el pato cojo?
- Estamos con el pato cojo, pero bien raro, porque no es porque le haya llegado el final del período, sino porque sus adherentes lo hicieron cojear, que es harto diferente.
- La semana pasada el diputado Andrade enumeraba los eventuales candidatos y sobre la UDI decía que si encontraban a alguien sin arresto domiciliario podrían tener uno, ¿ve probable que la UDI pueda levantar un presidenciable frente a la figura de Piñera?
- No me resisto a contestarle a Andrade. Él fue el jefe de campaña de Escalona y tuvo una derrota estrepitosa. Me gustaría que se lamiera las heridas antes de andar ladrando a otros. En el tema presidencial, la UDI está en una encrucijada que es real. Tenemos que avanzar a partir del próximo año, más vinculado a las elecciones municipales, en algo mucho más concreto en esa materia.
- Usted es uno de los mencionados.
- No está en mis planes. Yo trataría de buscar un candidato de la UDI, porque creo que es mucho más fácil para nosotros trabajar la lógica ideológica con un candidato propio y espero que sea exitoso. Ahora, no soy de aquellos que se resiste a apoyar a otro. Espero que ambos partidos, más los nuevos que se unan al conglomerado, tengan esta misma estructura mental de apoyar a alguien que represente el ideario, porque no se trata de buscar cualquier cosa, pero que también tenga una posibilidad razonable de ganar.
- ¿Tiene dudas sobre el potencial de Piñera? Se lo pregunto porque aún se le critica la falencia política.
- Creo que fue un gran gobierno económico social con debilidades políticas importantes. Y, más allá de las personas, tenemos que asumir que lo bueno que se hizo en materia social y económica tiene que ser una agenda que tiene que marcar la forma de hacer las cosas y que en materia política tiene que haber una revisión muy a fondo de cómo se enfrenta la tarea de gobernar.
- ¿Ve en la UDI alguna figura que pudiera competir en una eventual primaria con Piñera?
- Tiendo a creer que sí. No me pregunte cuál, porque creo mucho en la fortaleza institucional. Tiene que ver más con un tema interno, pero si usted me pregunta si es posible, creo que sí es posible.
- ¿Cree que el piñerismo dentro de la UDI esté tratando de evitar esa posibilidad?
- No, en eso hay diálogo y un debate súper maduro. No he visto instalada una lógica de piñeristas versus antipiñeristas. Se ha ido acrecentando la lógica de sentir orgullo de haber sido parte de un gran gobierno, pero también conciencia de que hay que tratar de buscar una alternativa propia.
- ¿Fue un fracaso del gobierno de Piñera no haber pasado la posta?
- No fue una buena noticia, pero eso no significa que sea un bache del que nunca podamos recuperarnos. Pugnaron elementos como que la presidenta Bachelet era realmente una gran candidata.
- ¿El caso Penta podría dificultar posicionar un candidato?
- A nosotros las cosas nunca nos han resultado fáciles. Somos un partido sufrido, lo hemos pasado mal. La gracia es que siempre hemos mostrado la capacidad de levantarnos en la adversidad. Si uno esperara que todos los astros se alinearan, la UDI no hubiera existido. Nosotros hemos funcionado con astros desalineados y hemos tratado de alinearlos, nos ha resultado muchas veces, otras no, pero esa fortaleza se mantiene incólume.
"Los que plantean la crisis son los ciudadanos"
- ¿La crisis es tan fuerte como dice la oposición?
- Los que plantean la crisis no son los políticos son los ciudadanos. No sé si usted había visto caer de 62% a 24% en un año, yo no lo había visto nunca. No había visto nunca que reformas que tienen buena prensa tengan mala evaluación ciudadana. Entonces, no somos nosotros, es la gente que se da cuenta. Estamos en una situación muy mala y muy difícil de revertir y eso es lo grave.
- Tiene que haber una fórmula para mejorar.
- Pensé que una forma de revertirlo era el cambio de gabinete, pero son más bien palos de ciego, porque un mes después en lo que todo el mundo entendió que había un cambio de rumbo, resultó que no lo era, sino un cambio de intensidad, al acantilado vamos más despacio.
- Lo que dice el ex senador Novoa.
- Es verdad, porque todos creímos que el rumbo iba a ser distinto, pero la Presidenta dice que el rumbo va a ser igual. Yo pensé que había un cambio de rumbo, pero me di cuenta que, más allá del esfuerzo que hace el ministro Burgos particularmente, como que el tironeo de la izquierda más dura dentro del gobierno es demasiado fuerte y lo va llevando, como el alacrán, al momento dramático.
- La derecha tiene cifradas las esperanzas en lo que pueda hacer la DC.
- No, yo no tengo mucha esperanza en la DC, porque es un partido que está indisolublemente vinculado a una lógica de centroizquierda y se ha dejado atrapar en las garras del poder en función de la alianza con esa izquierda.