- ¿En qué parte del ciclo está el consumo?
- Hemos corregido a la baja nuestras proyecciones de consumo privado para 2015 y 2016. El escenario de moderada recuperación que preveíamos hace unos meses está en suspenso debido, en parte, a los nuevos elementos de incertidumbre en el escenario internacional que se suman a los de orden interno.
Los ajustes en la economía China y Estados Unidos están repercutiendo en forma directa sobre Chile y Latinoamérica a través de los canales comerciales y cambiarios, pese a que por ahora los ajustes en China no han entrado en una fase de desestabilización o crisis. Nuestra proyección actual corresponde a un escenario base, pero sin duda vuelve a aparecer la necesidad de incorporar la eventual irrupción de condiciones más críticas, con aún mayores niveles de incertidumbre.
En todo caso, bajo un escenario base, es claro que con un tipo de cambio en $ 700 en lugar de $ 630 es difícil pensar que ya tocamos fondo en materia de consumo interno.
El mercado de durables seguirá bajo presión por los aumentos de precios y el gasto en bienes de consumo habitual tendría escasas probabilidades de recobrar dinámica, por efecto del debilitamiento de los ingresos reales de los hogares.
Las expectativas en materia de empleo no son buenas y eso afecta confianza y disposición de consumo.
- Las estimaciones de Consensus Forecast apuntan a que el consumo privado se mantendrá creciendo a tasas por debajo del 3% por lo menos hasta el último trimestre de 2016. ¿Coinciden?
- Sí, nuestras estimaciones van en la misma línea. Por ahora, los factores que gatillan demanda en consumo se mantienen con sesgo negativo: dólar, precios internos, empleo, salarios, confianza.
- El mercado laboral también tenderá a deteriorarse en lo próximo.
- Estimamos que en 2016 se creará un número de empleos similar al que observaremos este año: es decir, del orden de 90 mil, lo que sin duda se hará sentir en términos de una mayor tasa de desempleo, que debiera subir a 6,7% ó 6,8% y no contribuirá en nada a despejar el factor incertidumbre.
Prevemos una mayor reticencia de las empresas a fortalecer sus planes de empleo, tal como hemos detectado en las encuestas empresariales de los últimos meses.
- ¿Qué se ha visto en términos de las tendencias de consumo? ¿Hay un mayor enfoque en bienes no durables debido al alza del dólar?
- El consumo de durables ha sido, sin lugar a dudas, golpeado en este ciclo de desaceleración y alza del tipo de cambio. No veíamos recortes en este tipo de gasto desde la crisis de 2009, lo que evidentemente responde a su naturaleza pro cíclica. Esto significa que los hogares pueden optar por postergar los consumos en la fase declinante del ciclo y simplemente prolongar el uso de los bienes durables adquiridos en años anteriores.
La incipiente recuperación que comenzó a manifestarse en el segundo trimestre de 2015 no nos parece fácil de proyectar hacia fin de año. El tipo de cambio ha subido con mucha velocidad y se mantiene fuerte por un largo período, lo que sin duda afecta la estructura de precios de los durables. Los bienes no durables deberían permanecer creciendo débilmente, ya que no vemos catalizadores de una recuperación contundente en los próximos trimestres.