Los dilemas que enfrenta Chile en materia política, económica, social y en las relaciones laborales se tomaron una nueva versión número del congreso Percade 2015.
Y, como era de preverse, el proyecto de reforma laboral -que se tramita actualmente en el Senado- fue uno de los más comentados por los expositores, partiendo por el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC) Ricardo Mewes, quien fue el encargado de abrir el evento en representación de la Corporación de la Producción y del Comercio (CPC).
"Hoy estamos discutiendo una reforma laboral que claramente, y así lo han manifestado las propias autoridades, fortalece la negociación colectiva, sin abordar aspectos centrales como la productividad, capacitación y certificación de competencias, herramientas básicas para mejorar la competitividad", sostuvo.
Y agregó que si bien esos temas están quedando fuera de la discusión, "todavía estamos a tiempo de revertirlo".
En esa línea, se cuadró con lo planteado anteriormente por el presidente de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Hermann vön Muhlenbrock, y el titular de la CPC, Alberto Salas, en su rechazo al articulado proyecto del gobierno.
"No estamos en contra de las reformas, sino de la manera en que se han diseñado. Se debe legislar con visión de futuro, pensando en el Chile de los próximos 50 años, con una discusión adecuada que nos permita hacer buenas políticas públicas en beneficio de todos los chilenos", indicó Mewes.
La idea fue reforzada en un panel posterior dedicado exclusivamente a los dilemas en el mundo de la empresa y el trabajo por el primer vicepresidente de la Sofofa, José Juan Llugany, quien aseguró que la desigualdad se debe combatir con educación, lo que está relacionado con el salario y, a su vez, influye en la productividad, elemento clave -según el empresario- para disminuir la desigualdad.
"No es que estemos en contra de una reforma laboral, nosotros creemos que hay cosas que efectivamente hay que mejorar, hay que modernizar, pero en lo que no estamos de acuerdo -o tenemos muchos desacuerdos- es con este proyecto específico de ley", manifestó el dirigente de la Sofofa, quien añadió que tampoco está en contra de los sindicatos. Acto seguido, enumeró los temas del proyecto que más complican al empresariado, destacando el reemplazo en huelga, descuelgue, extensión de beneficios y piso mínimo de negociación.
Además, recalcó que con la reforma no se está pensando en todos los trabajadores, sino solo en los sindicalizados y en muchos casos, "incluso en las dirigencias sindicales".
"A todos nos gustaría disminuir considerablemente la desigualdad, es una tarea que tenemos pendiente. El tema es cuáles son los caminos que elegimos para hacerlo. Como digo, creo, de verdad, que esta reforma perjudica a los trabajadores", expresó.
Pese a esto, dejó en manifiesto la disposición del empresariado en combatir la desigualdad. "Podemos hacer reformas para atacarla, estamos dispuestos a poner todo de manera de disminuir esa brecha", concluyó.