"Yo no he dado vuelta la página, estoy contento", dijo el ministro del Interior Jorge Burgos a tempranas horas de ayer en La Moneda. Minutos más tarde, en un acto poco usual dado su clásico hermetismo, el ministro Segpres, Nicolás Eyzaguirre, se detuvo unos minutos en el Patio de Los Cañones para aclarar: "Tenemos un solo mandato de la Presidenta: trabajar unidos, tratar de llegar al máximo de consenso entre nosotros cuatro y cualquier diferencia es zanjada por la Presidenta de la República", además de aclarar que él jamás llamó a Valdés para trasmitirle un mensaje de la mandataria en torno a poner orden en la casa, según publicó un matutino el fin de semana.
Dichas escenas tenían un claro mensaje que bajó directamente desde el salón presidencial, luego del comité político de ministros que se lleva a cabo todos los días lunes: centrar esfuerzos esta semana en la agenda legislativa específicamente en materia laboral (votación en general en comisión del Senado), de seguridad pública (votación de agenda corta en la comisión de Constitución de la Cámara Baja) y probidad (marcha de los seis proyectos de ley con urgencia en el Congreso), postergando para más adelante reuniones de corte más político como el tradicional comité que se realiza los lunes en La Moneda con los presidentes de partido. Y en ese marco, es que ambos ministros intentaron poner paños fríos y dar señales de tranquilidad ante cierto nerviosismo reinante en la Nueva Mayoría, que incluso llegó al nivel de que algunos dentro del conglomerado especularan ayer con la renuncia de Burgos.
Esta especulación se dio entre algunos motivos por la molestia que habría provocado en la mandataria la perfomance que tuvo el ex presidente Ricardo Lagos el jueves pasado en la reunión que sostuvo con el vicepresidente, Jorge Burgos, que incluyó un preparado punto de prensa a la salida de Interior, con pedestal incluido. Varios, tanto en La Moneda como en la NM, concuerdan que, al menos, la puesta en escena fue desafortunada desde el punto de vista comunicacional. Diagnóstico que la Presidenta también compartió.
La orden de suspender reunión con presidentes
Dentro de este escenario que trazó la Presidenta de terminar con el desfile de interpretaciones, cuñas políticas entre los presidentes de la NM y avanzar en la agenda, es que también se encuadró la suspensión de la clásica reunión de los lunes entre ministros políticos y timoneles de la NM. Dar un "respiro y un segundo aire" a las tensas reuniones de las últimas semanas y colocar las fichas en el Parlamento. "La razón es que la semana pasada hubo dos reuniones, fueron muy intensas ambas y efectivamente había habido algunos presidentes que querían aclarar definiciones, y consideramos que habían sido aclaradas. Interior creyó necesario que esta semana nos dedicáramos a poner en práctica esas definiciones políticas en la agenda legislativa", explicó el diputado (IC) y vocero de la NM, Sergio Aguiló.
Sin embargo, otro timonel criticó duramente la decisión del gobierno de interrumpir el diálogo político, advirtiendo que ello podría traer serias consecuencias en la tramitación legislativa de la semana, como expresó el presidente del PPD, senador Jaime Quintana. "Echamos de menos un comité político. Si mañana tenemos problemas en educación, uno podría decir: si hubiésemos tenido comité político hoy hubiésemos podido evitar algunos problemas, que espero no los tengamos".
En la Moneda en tanto hicieron un llamado a los partidos a terminar con las crispaciones. El portavoz de Palacio señaló que "este clima de ruido no ayuda en nada al desarrollo de Chile y somos todos, sin excepción, responsables de generar las condiciones para ese clima. La ciudadanía debe ver con distancia esta permanente disputa, las descalificaciones, los dimes y diretes, que reitero son parte de un debate inconducente que no es el ánimo del gobierno". En La Moneda admiten que la relación con los partidos se ha tornado muy compleja estas últimas semanas por la gran cantidad de diferencias al interior del conglomerado que se traducen en sucesivas cuñas poco afortunadas entre unos y otros.
Burgos-Bachelet
Expectación había en Palacio por la reunión que sostendría el ministro Burgos a solas con la mandataria, tras el comité político de la mañana, en donde abordarían los hechos de la semana pasada. Dicho encuentro se sostuvo en horas de la tarde, pero en conjunto con el ministro de Defensa, José Antonio Gómez, como expresó muy escuetamente el mismo jefe de gabinete tras abandonar el despacho presidencial. "Estuvimos reunidos Gómez y la Presidenta conmigo".
En paralelo otra reunión de coordinación legislativa se dio en la Segpres entre el ministro Eyzaguirre, su par de Hacienda Rodrigo Valdés, la ministra del Trabajo Ximena Rincón y la titular de Justicia Javiera Blanco, para abordar temáticas generales en torno a los proyectos en curso para esta semana.
la delincuencia es una "preocupación" del gobierno
"La delincuencia es un problema que preocupa a todas las familias chilenas independiente de la comuna de donde vivan. Como gobierno, no vamos a hacer oídos sordos a esta enorme preocupación", aseguró ayer la presidenta Michelle Bachelet al promulgar la ley que fortalece al Ministerio Público.
La nueva normativa, que forma parte de la agenda de seguridad que impulsa el gobierno, permitirá aumentar la dotación de la Fiscalía en 577 personas, quedando con un total de 4.255 funcionarios, y crea el Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos, para desarrollar estrategias e iniciativas para investigar delitos específicos.
De ahí que la mandataria destacara que "el gobierno no puede perseguir delincuentes, pero sí puede entregar herramientas y más presupuestos a los fiscales para que protejan a las víctimas y puedan hacer mejor su trabajo".
Y subrayó que la lucha contra la delincuencia "no es fácil" y que se trata de un área "en el que no podemos contarnos cuentos, aunque hay algunos que dicen tener soluciones mágicas".