Oposición endurece el tono y pide a Hacienda abrirse a modificaciones en su plan de emergencia económica por coronavirus

Hoy será un día clave para el equipo económico del Gobierno. Se prevé que a las 4 de la tarde ingresen al Senado y a la Cámara de Diputados los proyectos de ley que dan forma al paquete fiscal, por US$ 11.750 millones, que el Ejecutivo anunció el jueves pasado para enfrentar los efectos en empleo y la actividad derivados del avance del coronavirus y las medidas de aislamiento social.

Entre las iniciativas que ingresarán, se contempla la ley de protección a los ingresos laborales; la discusión inmediata para las modificaciones al Fondo de Cesantía Solidario; la creación del bono Covid-19; la capitalización por US$ 500 millones a BancoEstado; el nuevo fondo por US$ 100 millones para los municipios; la autorización para aumentar el techo de endeudamiento para el Fisco este año; y las medidas de alivio tributario, por citar algunos.

Si bien en un principio el mundo político se alineó detrás del mensaje del ministro de Hacienda, Ignacio Briones, sobre la urgencia de aprobar el paquete de estímulo fiscal, comienzan a surgir voces en la oposición que cuestionan el diseño de las medidas y piden a Teatinos 120 ir más allá en sus planteamientos.

Los senadores de la Democracia Cristiana (DC) Yasna Provoste y Jorge Pizarro elaboraron un documento en el que calificaron como "débil e insuficiente" el paquete fiscal de Hacienda y anticiparon que se requiere "perfeccionarlo" en el trámite en el Parlamento.

Los legisladores ponen el acento en la propuesta del Ejecutivo que permite suspender la relación laboral entre empleador y trabajador, quien mantendrá sus ingresos pero que provendrán de sus fondos del Seguro de Cesantía. En caso de extinguirse dichos recursos, el Fisco realizará una inyección por US$ 2.000 millones.

"O sea, en la práctica el Gobierno propone que los trabajadores se autoayuden vía uso de sus recursos ahorrados y que el apoyo fiscal de US$ 2.000 millones vía Fondo Solidario de Cesantía no sea la primera opción de uso. ¿Cuál es el apoyo fiscal entonces a los más vulnerables, a los trabajadores que transitoriamente sufrirán los efectos de esta suspensión temporal de la relación laboral? Según la propuesta de Hacienda es casi nula", criticaron Provoste y Pizarro.

Así, los parlamentarios buscan que primero se realice el aporte fiscal para solventar los ingresos de los trabajadores que vieron su relación laboral interrumpida producto de las medidas sanitarias, y que en caso de que este aporte se consuma se pueda recurrir a los fondos en el Seguro de Cesantía.

Los legisladores de la falange también apuntan a que el bono de $ 50 mil por carga familiar que se otorgará debe ser no solo por una vez, sino por los tres meses en que se extendería la cuarentena. "Es un gasto fiscal abordable (aproximadamente US$ 600 millones) y puede financiarse con mayor endeudamiento fiscal", proponen.

Más impuestos y congelar servicios básicos

Por otra parte, el senador PS e integrante de la comisión de Hacienda, Carlos Montes, propuso aplicar un impuesto a los altos patrimonios al país para financiar el mayor gasto fiscal derivado de la expansión del coronavirus. La propuesta se la expuso el viernes al ministro de Hacienda, Ignacio Briones.

El parlamentario aseguró que busca que se aplique un gravamen por una sola vez a las 140 fortunas más grandes del país.

Montes valoró los ejes del plan del Ejecutivo, pero criticó lo que él considera fue la exclusión de medidas para los trabajadores independientes, ya que solo las personas empleadas podrán acceder al uso de los fondos de cesantía para reemplazar sus ingresos laborales.

"Las medidas están bien orientadas, se enfocan en el trabajador y sus familias, las pymes y el empleo, pero nos interesa saber cómo se apoyará a los trabajadores independientes, por cuenta propia y desempleados. No hay nada hasta ahora", advirtió.

Por su parte, la bancada de diputados del PS valoró algunos puntos del plan fiscal, como la capitalización del BancoEstado y las medidas de protección al empleo. Sin embargo, pusieron el foco en medidas adicionales, como congelar las tarifas de algunos servicios básicos durante la emergencia sanitaria, en línea con lo que han realizado países como Francia e Italia.

"Propone suspender el cobro de servicios básicos por tres meses: luz, agua, gas, internet y telefonía, Y que su pago se realice en 36 cuotas a partir del mes de julio del 2020", señala el documento de la bancada.

Los socialistas también proponen otras ideas de alivio, como suspender por tres meses el pago de créditos hipotecarios y créditos de consumo, sumándolas al final de los créditos sin acumular intereses; y ampliar la gratuidad en la educación superior durante 2020 y 2021 "a lo menos" desde el sexto decil al octavo decil de ingresos.