La dura crítica de José De Gregorio a la generación gobernante: “Cuidado con creerse insuperables"
El expresidente del Banco Central llamó a sus alumnos a tener "cuidado con creerse insuperables e indestructibles, pues ese es el mejor camino hacia el fracaso".
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“Cuidado con creerse insuperables e indestructibles, pues ese es el mejor camino hacia el fracaso”.
Ese fue uno de los principales mensajes que entregó el decano de la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile, José de Gregorio, al grupo de jóvenes que se titulaba de Ingeniería Comercial en la tarde de este miércoles.
En el discurso de titulación, el expresidente del Banco Central procedió a contarles una historia sobre “un grupo de jóvenes que lo tuvo todo. Es un grupo que cuando estaba en el colegio salió a protestar y remeció al país. Luego ese mismo grupo en la universidad siguió reclamando por temas que son de mucha justicia como el acceso y los costos de la educación superior, y volvió a remecer al país”, haciendo referencia a la generación a la que se asocia al presidente Gabriel Boric, la ministra Camila Vallejo, y el exministro Giorgio Jackson.
“Entraron a la política, al Parlamento, y lideraron una protesta social inédita en Chile. Consiguieron un acuerdo para cambiar la Constitución, y lo tuvieron todo. Llegaron al Gobierno, lideraron el grupo que escribía la Constitución”, continuó el economista.
“Lo tenían todo, y lo perdieron todo. Incluso, la nueva Constitución la terminaron escribiendo sus mayores adversarios. Terminaron haciendo un Gobierno con bases similares a los que tanto criticaron y pareciera que prefieren mantener la Constitución que tanto demonizaron”, criticó duramente quien liderara el instituto emisor entre 2007 y 2011.
“El final no está escrito, la redención es posible, es probable y es deseable, tienen mucho por delante, sin embargo, este es un caso muy cercano y que nos sirve para preguntarnos ¿qué le pasó a este grupo?”, dijo el decano de la FEN a sus estudiantes.
“Creo que es precisamente lo que les mencioné antes”, continuó, y agregó que “ese sentido de superioridad intelectual y moral que nos lleva a desconocer las complejidades de la realidad, a no aceptar que otros también pueden tener razón, a no reconocer nuestras limitaciones y nuestra ignorancia”.
Además, el expresidente del Banco Central criticó a dicha generación por “creer que con un par de ideas resumibles en slogans, probablemente atractivo en una asamblea, podemos resolver los problemas de un país”.
“Faltó reflexión, faltó cuestionarse con severidad, hasta el cansancio escuchar al que piensa distinto y tratar de entender su lógica antes de descalificar”, cerró el decano.