Macro

Economista chilena en EEUU: “Cualquier cosa que haya hecho Trump va a quedar debajo de la alfombra por lo que pasó al final”

La doctora en Economía de la U. de Chicago analiza la situación política de EEUU y de Chile y advierte que le preocupa más el panorama nacional, porque todavía no hay un rechazo a la violencia, algo que sí ocurrió inmediatamente tras los recientes ataques al Capitolio.

Por: Montserrat Toledo | Publicado: Lunes 18 de enero de 2021 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

 

Una suerte de paralelo entre lo ocurrido en el Capitolio de Estados Unidos y el estallido social en Chile establece la economista chilena y profesora emérita de la Universidad de California en Long Beach, Alejandra Cox.

Desde su casa en California, la consejera de LyD plantea que si bien los extremistas favorables a Donald Trump habían anunciado que se manifestarían, “la cantidad de gente y la poca capacidad de defensa que tuvo el Capitolio para parar ese movimiento fue sorprendente”.

Sin embargo, a juicio de la doctorada en Economía de la U. de Chicago, que la semana pasada participó de Enade 2021, hay un aprendizaje: “Inmediatamente cuando empezó la violencia todos los políticos de todas las posiciones la condenaron”, recuerda.

- ¿Esa condena rápida y transversal a la violencia es una lección para Chile de la crisis de EEUU?

- Exacto. Cuando en octubre sucedieron las manifestaciones en Chile, si hubiera habido una reacción rápida y unánime de los políticos, otra cosa estaríamos viviendo. En Chile faltó una reacción unánime de los políticos, de los dirigentes, de los líderes. Ahora, claro, los políticos no son muy considerados líderes, pero eso también es así aquí. Aún así se tienen que levantar y decir esto no es aceptable.

- Dice que si hubiese sido así la situación en Chile, el escenario hoy sería distinto.

- Claro, porque se condonó la violencia, se consideró que hay gente que tiene muchas reservaciones, o está muy descontenta y con una cantidad de explicaciones universales para lo que podía estar pasando. Imagínate que en Chile el país está consumido por la violencia, el sur es un desastre. En Santiago y en las ciudades sigue habiendo mucha violencia, mucho asalto. Y la gente está asustada.

- ¿Se puede decir que Trump va a dejar un legado?

- Cualquier cosa que haya hecho Trump va a quedar debajo de la alfombra con respecto a lo que pasó al final de su gobierno. Va a ser recordado por esta crisis y por el hecho que no quiso aceptar el resultado de la elección, es lamentable. Ahora, yo creo que es merecido que se le vaya a recordar así.

Por otro lado, me gusta pensar en la elección de Trump en 2016 y que en 2020 obtuvo prácticamente la mitad de los votos. Tiene un apoyo popular enorme, que va mucho más allá de los extremistas que fueron a asaltar el Capitolio, los fanáticos. Lo que me preocupa y donde me gusta centrarme para pensar en el futuro es qué pasa con esa población que lo apoyó en 2020, después de que había habido mucha controversia durante su gobierno.

- ¿Y quiénes son ellos?

- Hay una población enorme en EEUU que está muy desilusionada con lo que les está pasando, algunos están no solo con problemas económicos, sino de cuál es su visión, de lo que los políticos pueden hacer por ellos, y que vieron en Trump un personaje que les hablaba a ellos y los entendía.

Trump les decía, en resumen, lo que les ha pasado a ustedes es terrible. Nadie los comprende, y yo voy a hacer que América sea un gran país de nuevo. Entonces cada uno agarró esa idea y la interpretó como quiso.

- ¿No es paradójico que con tal aumento del desempleo y millones de empleos perdidos, la mitad del país vuelva a respaldar a Trump?

- Claro. Cuando la gente quiere creer algo, dice no es culpa de Trump, es por la pandemia. A él se lo acusó de no tomar en serio la pandemia y hacía todo el tiempo este balance entre lo económico y salud. Mucha gente desempleada decía hay una exageración con respecto a las cuarentenas, y no veían a Trump como el gran arquitecto de las cuarentenas. Si tú quieres no echarle la culpa a él, lo puedes hacer.

El día de la elección fue unánime la sorpresa, cómo era posible que hubiera sido tan peleada. Históricamente un Presidente que tiene este nivel de desempleo, ni cerca está de ser reelegido, esto fue extraordinario. Tenía todo en contra, supuestamente, pero mucha gente lo sigue viendo como el que me entiende. Es un artista del populismo.

“Unidad nacional”

- En octubre dijo que le preocupaba más la situación de Chile que la de EEUU, ¿sigue siendo así?

- Sigue siendo así, porque aquí hubo una reacción muy rápida a la violencia y ahora la gente comenta lo que pasó, pero lo habla en pasado. Es algo que pasó, en Chile sigue pasando.

Es algo que no sé cómo van a solucionar y creo que es un tema de entrenamiento, de unidad nacional en que todo el mundo entienda que lo que tenemos que hacer para mejorar la situación, y el futuro de la gente joven y de mediana edad, es hacer un esfuerzo importante de entrenamiento.

- En lo económico, ¿qué es lo que más le preocupa de Chile?

- Hoy en día el empleo. En el trimestre septiembre-noviembre del 2020 hay 1,1 millones menos empleos que en la misma fecha del año anterior. Algunos sectores es probable que se recuperen en la medida que se domine la pandemia y se reactive la actividad. Pero en algunas áreas como comercio, por ejemplo, algunos empleos se van a perder porque la tecnología ya venía avanzando. Hay una amenaza y está a la vista de los clientes y de los trabajadores en todo tipo de área.

- ¿Las autoridades deben apostar por la capacitación?

- Absolutamente. Por la reconversión, por la capacitación. Es muy importante que las autoridades hablen, pero no solo las autoridades, que se hable de este tema como algo que está pasando, que es como la gravedad: está con nosotros y que no podemos pelear en contra. Tenemos que trabajar con ella y para eso lo más importante es entender exactamente qué es lo que está pasando. Este es un cambio técnico que tiene que ver con el uso de la computación.

Tenemos que empezar a pensar no solamente en lo que ya pasó, sino que en lo que va a seguir pasando y entender cómo cada empleo tiene tareas repetitivas y no repetitivas. Lo queramos o no, la definición de ese trabajo, la organización de ese trabajo va a cambiar y, por lo tanto, la persona tiene que saber cambiar. Lo que importa ahora es que los colegios y las universidades cuando gradúen a sus estudiantes digan qué tareas sabe hacer la gente. Que haya conciencia de que es importante que la gente aprenda destrezas.

- En las últimas semanas millones de chilenos volvieron a cuarentena, ¿esto pone en riesgo la recuperación esperada para 2021?

- Es complicado. Por un lado es verano en Chile, y lo que he escuchado de distintas fuentes es que la gente se ha relajado con la seriedad de la cuarentena y la distancia. Y no puede haber una recuperación sin el control de la pandemia.

Pero esta es una oportunidad para preparar a las personas y para que ayudemos a que los que se van a quedar sin trabajo puedan prepararse para uno mejor al término de la pandemia. No veo cómo va a haber una solución antes de que todo el mundo se vacune, y van a pasar varios meses.

En el intertanto se puede partir con los conceptos, las ideas y readecuación en los centros de enseñanza, que se preocupen de poner en el currículum que se tienen que incluir destrezas importantes para el mundo de hoy.

- Con las nuevas cuarentenas se está pidiendo volver al teletrabajo. ¿Cómo lo evalúa en Chile?

- Ha sido más o menos lo que ha pasado en todo el mundo. El teletrabajo ha podido proteger el empleo de gente como tú, de gente que está trabajando en análisis, en finanzas, en educación. En algunas áreas es más idóneo que en otras. Es una experiencia que nos enseña y que deja muchas lecciones, que sorprende. El hecho de que algunos estudiantes estén en China y otros en la esquina y los dos están en Zoom es perfecto. Eso también nos enseña, nos abre el mundo a oportunidades que antes no se daban.

- ¿Cómo ve el debate sobre pensiones en Chile?

- Bastante deficiente, se ha demorado demasiado, llevamos prácticamente 15 años en este proceso. El objetivo está claro, todo el mundo está de acuerdo, pero la solución va más allá de aumentar las contribuciones del 10% al 16%.

Lo clave en Chile es que la gente aporte, eso es lo que está fallando, porque la gente que ha aportado tiene buenas pensiones. Lo que hay hoy día en el Congreso es una discusión bizantina, que no sirve.

- ¿Se requiere un debate distinto y un esfuerzo más radical?

- Exacto, requiere apuntar donde es donde fallan las cosas, las lagunas, la informalidad, eso no se está haciendo. Así que nota deficiente.

Lo más leído