El futuro del conglomerado mediático Prisa en América Latina está en juego. La instancia decisiva será la próxima junta de accionistas programada para el 25 de febrero próximo, cita en la cual su presidente Joseph Oughourlian, propondrá separar la unidad de medios de Latinoamérica de las actividades del grupo en España y Europa Medios. Una decisión que puede tener consecuencias relevantes para los medios de comunicación chilenos que pertenecen al holding como Radio ADN, FMDOS, Concierto, Los 40 y El País (ver infografía).
La drástica decisión en manos de los accionistas de Prisa responde a los efectos de una crisis financiera persistente. En los primeros nueve meses de 2024, la compañía ya anotaba pérdidas por US$ 39,1 millones, profundizando los números rojos obtenidos en 2023: US$38,5 millones.
Otra variable gravitante para el grupo -que a su área de medios suma una división educativa a través de la editorial Santillana-, es su abultado endeudamiento. “La estrategia de expansión de los últimos años ha elevado la deuda de Prisa en más de US$ 752 millones. Esta situación ha llevado a reiteradas gestiones deficitarias del consorcio”, explicó el director de la consultora VGB Visión y exdirector de fiscalización del CNTV, Luis Breull.
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¿Independencia o venta?
Si la propuesta de Oughourlian se concreta, analistas no descartan que, a mediano plazo, la filial latinoamericana termine vendiéndose y separándose en distintos holdings mediáticos, lo que permitiría generar liquidez para el grupo. Tal como sucedió con la enajenación de Santillana España en 2020 que fue para refinanciar su deuda hasta 2025.
“Sus niveles de endeudamiento y déficit son muy elevados y no han podido revertirse en la última década, ni siquiera con la recaudación de US$465 millones por la venta de Santillana España”, advirtió Breull.
“El ajuste será fuerte, y la prioridad del grupo es ordenar la casa en España y Europa”, concluyó.
Esta medida afectaría el negocio en una quincena de países del continente, incluidos Estados Unidos, México, Colombia, Argentina y Chile, entre otros.
En estos mercados, Prisa gestiona más de veinte marcas de radio y sus respectivas plataformas digitales, además del portal AS y la edición del diario El País.
Con esta reestructuración, todas estas operaciones quedarían agrupadas en una filial independiente. Su presencia en América le otorga un alcance potencial de 600 millones de personas.
Conflictos internos
La fragmentación de Prisa no solo responde a su crisis financiera, sino que también pone en evidencia las tensiones entre sus principales accionistas.
La propuesta de separación de sus medios en América respecto del núcleo europeo “implica un propósito de futuro, de sostenibilidad, que confronta las visiones de sus distintos grupos controladores”, explicó Breull, donde los representantes españoles no son partidarios de esta acción, que redundaría en limitar su marco de influencia en Iberoamérica.
Prisa está envuelta en una disputa accionaria en la que el presidente - que asumió el cargo en diciembre de 2020 -como socio mayoritario en representación de la firma de inversión estadounidense Amber Capital-, cuenta tan solo con el apoyo de Vivendi, sumando entre ambos un 41,3% del capital (ver infografía).
En el lado opuesto aparecen un grupo de accionistas españoles liderados por la sociedad Global Alconaba, que tiene otro 7% de participación, y que cuenta con el apoyo de Adolfo Utor, con otro 5,4% y Diego Prieto con 3,1%, con lo que alcanzan entre todos ellos una porción de 15,5%, a la espera de las decisiones que tomen Carlos Slim, Santander o los Polanco.
Impacto en Chile
Chile es uno de los mercados más relevantes de Prisa en América, después de Estados Unidos (Los Angeles y Miami), México, Colombia y Argentina.
A través de Grupo Iberoamericana Radio Chile, es el consorcio radial más fuerte del país con diez emisoras claramente segmentadas que abarcan una amplia diversidad de públicos y estilos.
De ahí que las decisiones que se tomen a nivel de la cúpula del conglomerado pueden implicar no solo una nueva estructura ejecutiva a nivel continental a la cual reportar, sino también un cambio de estratégico en el cual la filial en Chile deberá demostrar su relevancia en este escenario.
A la fecha, Grupo Iberoamericana Radio Chile ostenta una importante posición en el mercado de audiencias y publicidad desde hace una década (con cifras superiores al 40%).
“Pese a la sostenida baja de inversión publicitaria en medios tradicionales, se ha mantenido como un grupo con marcas líderes en entretención y mujeres, así como competitiva en el plano informativo”, comentó Breull.
La pregunta de fondo es qué tan probable es que finalmente se concrete la separación del Grupo Prisa. Para Breull “dependerá de cuán crítica se evalúe la situación de endeudamiento del consorcio, que hoy equivale a cuatro veces su Ebitda”.
Un factor decisivo que tendrán al frente los líderes de la junta de accionistas convocada para este martes en Madrid, que será determinante para definir el futuro de la compañía y su presencia en América Latina.