Déficit fiscal supera lo estimado en 2019 y este año alcanzaría un record desde 1990

La Dirección de Presupuestos (Dipres) dio a conocer ayer el cierre presupuestario de 2019, año marcado por la desaceleración de la economía y el impacto de la crisis social, ambos factores que se sintieron con fuerzas en las finanzas públicas.

Los resultados dieron cuenta de un déficit fiscal efectivo que superó las expectativas del Ministerio de Hacienda el año pasado, al ubicarse en 2,8% del PIB. Esto implica cinco décimas sobre la revisión de la cartera post crisis social y repite el déficit de 2017, el que en su momento era el más alto desde la crisis subprime de 2008-2009.

Y la situación de estrechez continuará este año: la Dipres pronostica que el saldo negativo de las arcas públicas se empinará a 4,6% del Producto, su nivel más alto de los últimos 30 años.

La situación estructural del Fisco también empeoró. Si bien aún queda por incorporar el dato de crecimiento del PIB de 2019, la entidad prevé que el saldo estructural cerraría en 1,5% del PIB, tres décimas por encima de lo proyectado post crisis social.

¿Las perspectivas para 2020? Que el saldo se empine a 3,3% del Producto, el déficit más alto desde que se implementa la regla de balance estructural en 2001.

Dichas proyecciones serán incorporadas en el próximo Informe de Finanzas Públicas (IFP), que publicarán Hacienda y Dipres.

El director de Presupuestos, Matías Acevedo, utilizó ayer su cuenta de Twitter para dar a conocer algunos de los ejes de la ejecución presupuestaria. Empleó un hilo, replicando la estrategia del ministro de Hacienda, Ignacio Briones, para comunicar temas ligados a la cartera.

Fisco sobreejecuta en 2019

El mayor déficit que registró el aparato estatal el año pasado se explica, en parte, por la caída de los ingresos totales, que cedieron 1,1%.

Por una parte, los ingresos tributarios netos se redujeron 1,4% en 2019, con pagos del resto de los contribuyentes que cayeron 2,5%, mientras que la tributación de la minería privada se expandió 21,2%.Los traspasos de Codelco al Fisco se desplomaron un 37,8% en 2019.

En el detalle, lo recaudado por impuesto a la renta cedió 3,2%, mientras que el IVA 1,4%.

Otra de las causas del déficit más alto fue que el gasto público se expandió a tasas superiores a lo que esperaba el Gobierno. Los desembolsos del aparato estatal crecieron 4,2% en 2019, ocho décimas arriba del pronóstico de Teatinos 120.

El gasto corriente -destinado a la operativa del sector público y que representa el 84,7% del erario- avanzó un 4,3%, de la mano del 3,7% de expansión de los desembolsos para contratar personal y pagar sueldos, mientras que lo gastado en compras de bienes y servicios de consumo crecieron 2,8%. Lo pagado por el Fisco por intereses de la deuda mostró una expansión cercana al 10%, con una deuda bruta que cerró representando el 27,9% del PIB, un record desde 1993.

El gasto de capital -que incluye inversión pública y transferencias de recursos- se recuperó al avanzar 4,1%, de la mano de una inversión pública creciendo 1,6% y las transferencias de capital 7,2%.

De esta forma, el Fisco sobreejecutó en tres décimas el erario el año pasado respecto a los recursos que le aprobó el Congreso.

Se reducen fondos soberanos

Los fondos soberanos redujeron en más de US$ 2.000 millones el valor de sus activos en 2019. Por una parte, el valor de mercado del Fondo de Estabilización Económica y Social (FEES) pasó de US$ 14.133 millones a US$ 12.233 millones el año pasado, de la mano del retiro de US$ 1.000 millones en recursos para solventar parte del mayor gasto público en el marco de la nueva agenda social.

El Fondo de Reserva de Pensiones (FRP), por su parte, aumentó desde US$ 9.663 millones a US$ 10.812 millones su valor de mercado en el período.