Por Claudia Rivas A.
Aunque no faltan los que tanto en privado como en público no descartan que el ex presidente Ricardo Lagos sea la figura que termine representando a la Nueva Mayoría en los comicios de 2017, su anuncio de que no pretende repostular fue interpretado de diversas maneras en el oficialismo. Mientras unos creen que lo diga o no, será finalmente la carta de la coalición; otros agradecen su generosidad por permitir el desarrollo de nuevos liderazgos con su decisión.
En una entrevista concedida al diario español El País, Lagos señaló que “yo creo que para un hombre de mi edad [77 años] el futuro está un poquito pasado. Otra cosa es que me embarque en los temas de futuro, que en Chile van a ser el agua, la energía… Un expresidente se dedica a estas cosas. Respecto a que en dos años hay elecciones, las encuestas…, no, no, yo ya fui presidente”.
Si bien no es la primera vez que el ex mandatario hace esta afirmación, en la NM esta vez le dieron encontradas interpretaciones. La mayoría, eso sí, parte de la base que a estas alturas del segundo gobierno de Michelle Bachelet es prematuro hablar de candidaturas presidenciales.
En un hecho que el mal momento que viene atravesando el gobierno ha generado que la figura de Lagos cobre especial relevancia en el oficialismo, que de mantenerse el actual escenario ve complicada su proyección. Para el timonel de la DC, senador Jorge Pizarro, “Lagos no dice nada nuevo” al reiterar que no será candidato “y el tema presidencial es para dos años más”. A juicio del dirigente falangista, las declaraciones del ex mandatario “no cambian en nada” la situación del pacto oficialista.
Sin embargo, el senador del MAS Alejandro Navarro parte de la base de que “la constante en los candidatos presidenciales es que niegan hasta el último minuto serlo”. Incluso va más allá instando a que “¡digámoslo francamente! Hay quienes han constituido un comando de Lagos, hay quienes han renunciado a este gobierno de Bachelet para sumarse a ese comando. Y, en lo personal, creo que a Lagos la idea no le disgusta”.
Pero agrega si el ex presidente vuelve a rechazar la idea de una candidatura sería “porque aceptarlo es entrar a competir con la presidenta Bachelet en momentos en donde Bachelet requiere mucho apoyo (…). Y estos aprontes y negativa del ex presidente la siento como una señal de respaldo a la Presidenta”.
El liderazgo del ex mandatario en el oficialismo es algo que no deja lugar a dudas. Todos comparten que es una figura importante para el sector, pero para el diputado PPD Pepe Auth –que ha expresado públicamente su inclinación por una candidatura de Ricardo Lagos Weber- eso no significa que deba expresarse en una candidatura presidencial. De hecho, le parece “lo más sano que hay” que Lagos Escobar se haya mostrado contrario a ello. Y cree que el ex presidente “tenía que despejar una incertidumbre que se había generado en el sistema político. Él dice lo que yo he tenido claro siempre”.
Según el legislador, que Lagos aclare su situación de manera tan nítida “permite que se discuta sobre alternativas reales”, pues está convencido que mientras esta figura planeara como eventual candidato “es difícil que emerjan candidaturas con viabilidad” y concluye que los dichos de Lagos son “un acto generoso”. Aunque advierte que siempre “habrá personas que apuesten a lo imposible, pero aquí hay que ser realistas”.
En la misma línea de Pizarro, el diputado socialista Osvaldo Andrade cree que en materia presidencial hay que esperar, porque “es prematuro para hacer un juicio certero sobre estas cosas”. Y sugiere que a estas alturas habría que tomarse “con beneficio de inventario” las declaraciones en relación con candidaturas presidenciales. En su opinión, los dichos de Lagos no cambian en nada el escenario de la NM y que “lo urgente es fijar el procedimiento (para determinar el candidato), los nombres van a aparecer”.
En medio del debate sobre los dichos del ex presidente Lagos, en la NM apuntan mayoritariamente a que debe haber primarias para resolver el nombre y surgen algunas de las cartas de los partidos que ya se mencionan como Ricardo Lagos Weber (PPD), Ignacio Walker (DC) e Isabel Allende (PS).