Bolsas caen con fuerza y Nasdaq pierde más de 2% tras dichos de gobernador de la Fed que acentúan temores de recesión

El tono de alarma de un alto funcionario de la Reserva Federal se sumó a débiles cifras de empleo en Estados Unidos para intensificar los miedos de recesión este viernes, desatando una explosión de ventas de acciones para tomar refugio en instrumentos de deuda.

El Nasdaq Composite perdía 2,52%, el S&P 500 bajaba 1,64% y el Dow Jones retrocedía 0,96% al inicio de la tarde en Wall Street, con lo que el S&P se dirige a cerrar su peor semana desde marzo de 2023.

Mientras tanto, el S&P IPSA chileno caía 1,53% a 6.264,49 puntos, con casi todas sus 29 acciones en rojo y bajo la especial presión de grandes como SQM-B (-4,11%), Latam (-2,67%) y Cencosud (-2,04%).

Las plazas europeas cerraron también en rojo, mientras a nivel de los commodities, el petróleo Brent amenazaba con perder los US$ 70 por barril.

La hora de actuar

Publicadas esta mañana, las nóminas no agrícolas de agosto fueron menores de lo esperado (142 mil versus 165 mil), con una revisión neta negativa de 86 mil nóminas en dos meses.

"Creo que nuestra paciencia durante los últimos 18 meses nos ha servido de mucho. Pero la actual serie de datos ya no exige paciencia, sino acción", dijo el gobernador Christopher Waller de la Fed en declaraciones preparadas para un discurso en Indiana.

La autoridad estimó que "el balance de los riesgos se inclina hacia el lado del empleo en nuestro mandato dual (de controlar la inflación y velar por el empleo)", por lo que "la política debe ajustarse en consecuencia".

Los comentarios alimentaron la especulación frente a la posibilidad de que la Fed inicie su ciclo de relajación monetaria este mes con un gran recorte de 50 puntos base (pb), pero luego estas expectativas se moderaron, con lo que 25 pb se mantiene como el caso base del mercado.

Alineado con estas percepciones, el rendimiento del Tesoro a dos años se hundía a mínimos desde septiembre de 2022, a medida que los inversionistas buscan refugio en los instrumentos de deuda, apuestas que se beneficiarían de una más profunda relajación monetaria.