El inicio de las Reuniones Anuales del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) tuvo la presencia de la Premio Nobel de Economía 2019, Esther Duflo, quien en uno de los paneles de la jornada se hizo cargo de la necesidad de proteger a la población vulnerable en medio de crisis crecientes.
La economista destacó la importancia de los programas de protección social como un cortafuegos ante situaciones complejas.
“Es crítico estar preparado antes de que una crisis golpee”, afirmó. Y agregó que “hay que ponerse de acuerdo políticamente sobre lo que hay que hacer ante una catástrofe dada. Y también tenemos que estar preparados logísticamente para que eso ocurra sin pérdida de tiempo”.
Esto, como parte de las lecciones que dejó el Covid-19, en el cual los países más ricos gastaron el 25% de su Producto Interno Bruto (PIB) en estímulo fiscal, mientras que en los más pobres fue el 2%. Una brecha que se vio tanto en la protección financiera de los ciudadanos, como en la distribución de las vacunas.
Duflo resaltó también la necesidad de programas sociales en el contexto del cambio climático, señalando que 6 millones de personas podrían morir a causa de este fenómeno cada año para finales de siglo, la misma cantidad que hoy fallece por enfermedades infecciosas.
En tanto, la distribución de los efectos también genera una brecha, ya que son los países más pobres los que están más expuestos y es más difícil que se adapten, ya que no pueden dejar de ir a trabajar cuando hay altas temperaturas o usar aire acondicionado.
“Los programas de protección social pueden ayudar con ambos tipos de adaptación. Proteger a posteriori de las catástrofes, reducir la vulnerabilidad. Ex-ante y también mejorando su capacidad de adaptación cuando estos programas se combinan con ayuda para invertir en otras actividades”, explicó.
Sin embargo, advirtió que no está resuelto cómo financiar esto y que no dará un rendimiento financiero. “Es una inversión social y humana. Así que creo que es necesario pensar seriamente en la cooperación mundial para recaudar fondos para este tipo de esfuerzo, y no solo para los esfuerzos de mitigación”, señaló.
El primer día
A las 08:00 horas empezaron a llegar los primeros asistentes al evento, para escuchar lo que sería el inicio de una asamblea que hace 23 años no se desarrollaba en Chile.
La primera parte del evento estuvo marcada por el presidente del BID, Ilan Goldfajn, quien dialogó con diferentes actores de la institución.
Para el BID, la seguridad forma parte de la agenda común. Así de claro lo dejó la directora técnica de seguridad ciudadana de la institución, Nathalie Alvarado, quien sostuvo que un estudio del banco, reveló que el crimen y la violencia le cuestan a la región aproximadamente el 3,4 del PIB.
Con ello, la directora afirmó que la cifra equivale a más o menos el 80% de todo el presupuesto público en educación, según la abogada. “Esta cifra, duele”, agregó.
Pasadas las 14:00 horas, el presidente del BID se volvió a dirigir al público, para dar inicio a lo que sería, una segunda tanda de este seminario.
Acá, el físico chileno, César Hidalgo, se dirigió al público en la apertura del seminario “Innovar para erradicar: cómo la tecnología puede eliminar la pobreza” donde sostuvo que en un futuro, “la mayor parte del crecimiento la veremos concentrada al sur asiático” y que hoy, el comercio digital es parte de lo que se vendrá en los próximos años, “es un tren que uno no se quiere perder”.
En ese sentido, destacó que este tipo de comercio crece un 25% al año y que “tiene un movimiento diferente”. Así, recordó cómo se debe estar preparado ante cualquier eventualidad, que según dijo, en 2020 fue el Covid-19.
“En ese año fue el Covid-19 y hoy pueden ser los aranceles”, dijo.
Luego de su presentación, se reunió en el escenario con Vindhya Vasini, ministra de Servicios Humanos de Guyana, Javiera Toro, ministra de Desarrollo Social de Chile y Joshua Blumenstock, profesor asociado en la Universidad de California Berkeley.
A lo largo del panel, trazaron la hoja de ruta para trabajar por la eliminación de la pobreza, destacando que la tecnología ayuda para descifrar y ordenar datos que permitan una mejor evaluación e implementación de políticas. Hidalgo destacó que nunca se llegará a una solución definitiva, pero “sí a una solución que es mejor que ahora”.

Felipe Larraín aboga por un “gran mercado común” en la región ante guerra comercial
Integración de América Latina y el Caribe en el nuevo orden internacional. Bajo ese lema, Clapes UC y el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe congregaron a una serie de especialistas para abordar el panorama para la región en medio de la guerra comercial.
En la cita expusieron el rector de la UC, Juan Carlos de la Llera; el presidente ejecutivo del Banco de Desarrollo de América Latina, Sergio Díaz-Granados; el expresidente del BID, Enrique Iglesias; el director de Clapes UC, Felipe Larraín; el ministro de Hacienda, Mario Marcel; y los titulares de Economía y Finanzas de Panamá y Uruguay, Felipe Chapman, y Gabriel Oddone, respectivamente.
“América Latina enfrenta una oportunidad histórica para redefinir su papel en el comercio internacional y fortalecer su integración regional. Para ello, es necesario superar barreras estructurales y políticas que han frenado el desarrollo de una comunidad económica más cohesionada. Avancemos hacia una verdadera integración: un gran mercado común en nuestra región”, dijo Larraín, quien fuera ministro de Hacienda en entre 2010 y 2014, y 2018 y 2019.