El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, expresaron, en una conversación telefónica, su esperanza de que la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA, su sigla en inglés) concluya a fines de año, informó ayer la Casa Blanca.
"Los dos líderes también discutieron la renegociación en curso del NAFTA y destacaron su esperanza de llegar a un acuerdo a fines de este año", dijo la Casa Blanca en un comunicado. La declaración se da en el contexto de que en las últimas semanas, el presidente de Estados Unidos había declarado en diversas ocasiones la posibilidad de terminar con el acuerdo.
La segunda ronda
Representantes de México, Estados Unidos y Canadá se reúnen hoy en la Ciudad de México hasta el 5 de septiembre, tras una primera ronda que se llevó a cabo en Washington del 16 al 20 de agosto.
La segunda reunión que sostendrán los equipos de negociación de los países partirá de los avances presentados durante la primera ronda realizada en Washington, en la cual se establecieron 25 de 28 mesas de negociación incorporadas en tres canastas de capítulos dependiendo de su complejidad.
Ildefonso Guajardo Villarreal, secretario de Economía, confió en avanzar lo más posible para que los negociadores puedan cerrar algunos capítulos durante la tercera ronda, que se llevará en Canadá, e ir destrabando los temas complejos. Desde julio pasado, los gobiernos de México, EEUU y Canadá coincidieron en que la fecha para concluir la renegociación del NAFTA sería a finales de este año o principios del 2018, derivado de los procesos electorales que habrá en México y EEUU, y posteriormente iniciar los procesos de ratificación en sus respectivos países.
"Contamos con tres canastas de propuestas", dijo el secretario de Economía. "El primer paquete es propositivo y no tienes que guardar para negociar; el segundo, posee elementos de concesiones y el tercero son temas más complejos", agregó.
Entre los temas de mayor alcance se encuentra: pymes, facilitación competitiva de los negocios, obstáculos técnicos del comercio, buenas prácticas regulatorias y telecomunicaciones, entre otros.
El segundo bloque de diez mesas que poseen cierto grado de complejidad está conformado por el tema laboral, acceso a mercado, financiero, compras de gobierno, textil, energía, entre otros.
Y para el tercer bloque, que son temas sensibles para los países, por la inquietud de EEUU de su déficit comercial con sus socios, y entre ellos se encuentra reglas de origen, inversión, propiedad intelectual.
México, sin presión
Guajardo afirmó que México no llega presionado a la segunda ronda y aseguró que seguirá de "buena fe" en la discusión, pero advirtió que dejará la mesa si el presidente estadounidense, Donald Trump, insiste en notificar la salida de Estados Unidos de dicho acuerdo.
"México no se presiona por nadie, en términos de los mejores intereses de la nación. Estamos en este proceso de renegociación y modernización del libre comercio, buscando claramente el avance y el interés nacional. Preparados para cualquier escenario", explicó luego de participar en la reunión plenaria del PRI en la Cámara de Diputados.
El secretario de Economía aseveró que México tiene fortalezas comerciales que no desaparecerían en caso de una eventual salida de Estados Unidos del NAFTA. Explicó que 40% de lo que se exporta, aún sin el tratado, continuaría con tasa cero de arancel, y el resto pagaría un arancel de 3,7%.