La Comisión Europea (CE) ha propuesto hoy
el desbloqueo de 19.000 millones de euros (US$28.200 millones) de dinero comunitario para
que los estados miembros los dediquen a la protección del empleo y a
la creación de nuevos puestos de trabajo durante 2009 y 2010.
Esta cantidad, proveniente del Fondo Social Europeo, sería
financiada íntegramente por las arcas comunitarias a condición de
que los países la inviertan en medidas concretas como la formación
continua de los trabajadores o el apoyo a las empresas para
flexibilizar las jornadas laborales.
La medida se enmarca en el "compromiso común a favor del empleo"
presentado hoy por la CE y elaborado junto con los interlocutores
sociales, que también incluye la creación de un instrumento
comunitario para facilitar microcréditos a pymes.
De lograr el respaldo de los Veintisiete en la próxima cumbre de
los días 18 y 19, estas "ambiciosas" iniciativas "podrían marcar la
diferencia" para frenar la rápida destrucción de empleo en la UE,
según afirmó hoy en rueda de prensa el presidente de la Comisión,
José Manuel Durao Barroso.
De forma excepcional, los 19.000 millones de ayudas serían
costeados durante 2009 y 2010 en su totalidad por el Fondo Social
Europeo, sin necesidad de cofinanciación de los estados miembros.
Esto evitaría generar "una mayor presión sobre las arcas públicas
de los estados miembros", y a partir de 2011, el Fondo Social
Europeo volvería a su funcionamiento normal, explicó Barroso.
Los países deberán emplear los fondos en las áreas prioritarias
de mantenimiento del empleo, creación de nuevos puestos de trabajo,
y adecuación de la formación a las necesidades del mercado laboral.
La CE plantea, asimismo, la inversión de 100 millones de euros
(US$142 millones) del presupuesto comunitario a un nuevo instrumento para la concesión
de microcréditos.
Bruselas calcula que este aporte, sumado a los fondos
provenientes del Banco Europeo de Inversiones (BEI) y de otras
instituciones financieras multilaterales, podría impulsar la
habilitación de hasta 500 millones de euros (US$710 millones) para las pymes europeas.