Buenos Aires entre pobreza, desempleo y altos costos
Recorrer la capital argentina está lleno de matices: en las zonas turísticas “todo es perfecto”, pero más lejos “la cosa está fea”. Tres ciudadanos cuentan cómo sobreviven el shock económico de Milei.
Por: DÉBORAH DONOSO MOYA | Publicado: Domingo 10 de noviembre de 2024 a las 22:04 hrs.
T+
T-
Fotos: Reuters
Compartir
desde Buenos Aires, Argentina
La vida en Buenos Aires tiene varias caras y, aunque algunas no están tan visibles actualmente, se reflejan en cifras que ponen presión a la gestión de Javier Milei.
De acuerdo con el Instituto de Estadísticas y Censos (Indec) de Argentina, el 52,9% de la población estaba bajo la línea de la pobreza en el primer semestre. En el Gran Buenos Aires, la cifra es similar: un 52,8% de las personas son pobres y casi el 20% está bajo la línea de pobreza.
Sin embargo, al recorrer la Ciudad de la Furia, parece no haber gran evidencia de ello. Pero el escenario cambia al caminar hacia Palermo o más allá de los lugares turísticos, con personas en situación de calle, familias pidiendo dinero o vendiendo pañuelitos entre los autos.
Loise, una taxista de origen brasileña en la capital, comentó que tras las medidas de shock tomadas por Milei, cuesta llegar a fin de mes.
“Está todo muy caro, es una locura. En Brasil las cosas están como a mitad de precio”, detalló la joven, quien también es estudiante de medicina y trabaja para pagarse su vida en la capital.
“El turismo ha bajado mucho en el último tiempo”, dijo. “De hecho, los argentinos viajan a Brasil y hacen videos mostrando lo económico que es el país respecto de Argentina, y los europeos que nos visitan dicen que acá es más caro que allá”.
Consultada sobre la pobreza visible, señaló: “Si vas para los barrios más lejanos de la provincia, la cosa está fea. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) es todo lindo, hermoso, perfecto, pero fuera de CABA hay mucha pobreza, mucha gente pasando hambre”.
¿Por qué no se ve la realidad en las calles? Porque está prohibido pernoctar o pedir dinero en CABA, relató Loise, y aseguró que hay mucha diferencia respecto del año pasado.
Hoy, dijo, “está difícil pagar las cuentas y los alquileres subieron un montón”.
La milanesa más cara
En un hotel en el pleno centro de Buenos Aires, Cindy, la recepcionista, comentó que “la ciudad ha cambiado mucho por la economía; a los extranjeros antes les convenía venir porque era más económico, pero ahora no”.
“Nosotros, en cambio, aún estamos tratando de recuperarnos porque el dólar oficial y el paralelo están casi igualados”, explicó.
Para quien hace vida en la urbe salir a comer algo simple puede costar entre 15 mil y 17 mil pesos argentinos (unos US$ 15 a US$ 18) más lejos del centro. Ahora, algo más típico en el centro bonaerense, como una milanesa con una bebida, puede llegar a costar 34 mil pesos.
En su caso, para subsistir, complementa sueldos con su pareja. “Para una persona que vive sola es duro”, dijo.
La voz del comercio
Desde el mundo privado, el diagnóstico es similar: hay presiones, pero las proyecciones son optimistas.
El presidente de la Cámara Argentina de Comercio, Natalio Mario Grinman, señaló que “la pobreza y el desempleo son verdaderos dramas que Buenos Aires, y Argentina, arrastran desde hace largo tiempo”.
“La auténtica solución está en el desarrollo del sector privado, que genere puestos de trabajo de calidad”, propuso.
Reconoció que a nivel de actividad y estructura del sector privado ha habido mejoras con la desaceleración de la inflación y las medidas del Gobierno para reducir la presión impositiva y tener un ordenamiento laboral moderno. Ahora bien, en el sector de las PYME se ha visto un mayor impacto del duro ajuste. “No es una caída dramática, pero sí se observa una baja en la cantidad de empresas en operaciones”.
Sin embargo, “hay señales alentadoras de que, con el repunte de la actividad, podrían generarse más oportunidades”.