desde ciudad de México
En la conferencia de prensa matutina diaria del 30 de octubre, un reportero de Guadalajara le preguntó a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, si buscaba replicar el modelo de ProChile para impulsar el emprendimiento en el país.
La mandataria, que asumió el cargo el 1 de octubre, dijo que estaban justamente afinando el proyecto para cumplir con uno de los 100 primeros compromisos de su programa de Gobierno: fomentar el emprendimiento de base tecnológica, promover la innovación y crear esquemas de desarrollo regional para el surgimiento de nuevas micro, pequeñas y medianas empresas. En esa tarea, están trabajando Marcelo Ebrard, secretario (ministro) de Economía, y la recién creada Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación a cargo de la doctora en Biología, Rosaura Ruiz.
Según cálculos de la Asociación de Emprendedores de México (ASEM), hay 3 millones de emprendedores de todo tipo en México, y de acuerdo a la Asociación de Internet.mx, en 2020 existían alrededor de 7.740 startups en el país, siendo los sectores más populares tecnología, finanzas y salud. Por ejemplo, solo fintech se contabilizan 773 nacionales y más de 217 extranjeras.
“Apoyar a los emprendedores y reducir la brecha digital son claves para fomentar un ecosistema que impulse la innovación y el desarrollo”, dijo Carlos Aravena, de Políglota.
Por eso que lo haga el actual Gobierno del partido de izquierda, Morena, es clave para los emprendedores y sobre todo para los chilenos que han aterrizado en el país del norte con fuerza sobre todo desde 2020.
Reducir los trámites, digitalizar servicios públicos y mejorar el acceso al mercado financiero se repiten entre lo que piden a Sheinbaum contactados por DF.
Buenas instituciones
Felipe Hurtado, de la foodtech Wild Foods, apunta a que “el nuevo Gobierno debiera abordar el tema de reducir la burocracia y digitalizar varios organismos del Estado, lo que hace mucho más fácil y transparente varios temas. Sigue siendo mucho más fácil hacer negocios en Estados Unidos antes que en México, lo que podría mejorar mucho las perspectivas económicas en el largo plazo”.
Mientras que Ariel Puga, de Finnecto, una plataforma de gestión de compras y pagos empresariales también apunta a eliminar las barreras burocráticas, así como reducir los costos asociados a iniciar y escalar negocios, especialmente para startups en sectores de alto crecimiento como la tecnología.
“Fomentar la colaboración público-privada, comenzando por promover incentivos fiscales para emprendedores, especialmente en etapas tempranas, como por ejemplo rebajas tributarias en los primeros años de operación. Es un gran desafío facilitar el camino para que los emprendedores se concentren en crear soluciones de impacto, generando empleo y contribuyendo al desarrollo económico local, con impacto en toda la región”.
Francisco Larraín, de Shinkansen, fintech que ayuda a las empresas a automatizar los movimientos de dinero, parte diciendo que “México es México y es atractivo gobierne quien gobierne por su tamaño y cercanía a EEUU. En México están y van a seguir estando las mejores startups de Latinoamérica”.
Sin embargo, para explotar ese potencial y que haya más unicornios latinos en fintech o IA hay algunas teclas que ajustar. “En México hay mucha informalidad y uso de efectivo, se requiere de más competencia en los mercados -especialmente el financiero- y citando a los recientes premios nobel Acemoglu, Johnson y Robinson, se requiere de buenas instituciones. En el caso mexicano esta necesidad es evidente, se requiere respeto al derecho de propiedad e igualdad ante la ley para todos los grupos de la población y no sólo para los pocos que pueden pagarlo. La formación científica de Sheinbaum da esperanzas de que entienda estos problemas y pueda avanzar ajustando las teclas necesarias”, dijo.
Benjamín Labra, de la plataforma inmobiliaria Houm, dice que el actual Gobierno “deberá mejorar el acceso a financiamiento, reducir la burocracia y abordar el desafío de la informalidad, cuyo costo sigue creciendo al integrar más gente a la formalidad. Incentivos fiscales y programas de capacitación ayudan mucho a fortalecer el ecosistema y la innovación en México”.
Carlos Aravena, políglota. Ariel Puga, Finnecto. Benjamín Labra, Houm. Francisca Noguera, Toku. Francisco Larraín, Shinkansen. Juan Pablo Zepeda, Examedi. Miguel Ángel Vergara, Instance. Hans Buckel, Cotalker. Felipe Hurtado, Wild Foods
Con los ojos en EEUU
Miguel Ángel Vergara, de la aceleradora de e-commerce Instance, apunta que “México es un país increíble para emprender. No solo por su tamaño, sino también porque veo una economía estable que, en los últimos años, ha sorprendido con su velocidad en la adopción tecnológica. Sin embargo, aún existen oportunidades; una de las más importantes para mí como emprendedor es la simplificación de los trámites burocráticos, una constante que enfrentamos”.
Por otro lado, a corto plazo, dice notar cierta incertidumbre en torno a las grandes inversiones anunciadas el año pasado. “Se percibía mucho impulso alrededor del nearshoring, pero ahora parece que muchas decisiones dependen de las elecciones en EEUU y sus posibles efectos en la región. Esto resalta la importancia de una estrategia interna sólida que permita a México consolidarse como un destino atractivo y minimizar la dependencia de EEUU”.
El nuevo habitante de la Casa Blanca es clave de cara a las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), cuya fecha de actualización está fijada para 2026.
Carlos Aravena, de la plataforma de idiomas Políglota, recalca que “México tiene un potencial enorme. Uno de cada 10 mexicanos tiene alguna conexión familiar con EEUU, pero la interacción con ese mercado está limitada porque solo el 4% de la población es capaz de mantener una conversación en inglés. El nuevo Gobierno debería enfocarse en cerrar esa brecha, apostando por la educación que realmente conecte al talento mexicano con las oportunidades globales. Además, apoyar a los emprendedores y reducir la brecha digital son claves para fomentar un ecosistema que impulse la innovación y el desarrollo. Es una cuestión de acelerar el crecimiento del país eliminando las barreras idiomáticas y culturales que frenan ese potencial”.
Acabar con la corrupción
Hans Buckel, de Cotalker, una plataforma de gestión integral de operaciones y procesos de empresas, opina que “en términos de lo que he vivido como country manager en Cotalker, sabemos la oportunidad que muestra este gran mercado, pero hay muchos desafíos culturales, burocráticos y éticos que hay que enfrentar para poder tomar espacio de este ecosistema. Esperamos que la doctora Sheinbaum en su calidad de científica apoye la innovación en industrias de energía donde tenemos mucha experiencia y la expansión a startups de tecnología los cuales serán los protagonistas en estos desafíos de transformación digital de las grandes compañías mexicanas”.
En temas de ética, ahonda Buckel, “la corrupción ha generado un mercado excesivamente regulado para poder controlar esto. Pero esta sobrerregulación genera un ciclo comercial excesivamente largo y forzoso para comenzar una relación con compañías grandes. Acá el Gobierno tendrá que jugar un rol muy estratégico en cómo poder generar un ambiente de negocios seguro, pero más ágil”.
Mientras que Juan Pablo Zepeda, de la healthtech Examedi, apunta que en general México no es un país tan fácil para cualquier empresa chilena, que entra a este país pensado que gracias a la cantidad de habitantes va a ser sencillo poder empezar y crecer.
“El ecosistema de emprendimiento local, la gran mayoría, se enfoca mayoritariamente al sector privado y poco al sector público. Creería más que nada por las complicaciones que existen para trabajar con ese sector en particular. Entonces el nuevo Gobierno para impulsar este ecosistema y generar mayor emprendimiento, necesita facilitar la creación de nuevas empresas, darle algún tipo de beneficio fiscal y/o fondos para que haya incentivos por emprender y, por último, generar mayores facilidades a estas empresas para poder trabajar con el Gobierno”.
Y agrega: “Esto generaría que tanto nuevas empresas locales fueran fundadas como también incentivos a empresas startups extranjeras puedan entrar a México y aportar con sus nuevas tecnologías a todo el mercado, lo cual es super importante para poder apuntar a un país desarrollado, que a mi opinión México tiene todo lo necesario para poder serlo”.
Mientras que Francisca Noguera, de la plataforma de pagos Toku, dice que “el principal desafío del Gobierno de Claudia Sheinbaum será contener la incertidumbre política generada por los cambios impulsados por AMLO, los cuales han debilitado la confianza en las instituciones. Además, México debe mantener su posición como un país que promueve el desarrollo de empresas tecnológicas y las apoya en la internacionalización de sus soluciones”.
Entre las medidas necesarias, “Sheinbaum deberá ser clara en sus propuestas económicas, marcar autoridad diferenciándose del Gobierno anterior y mantener relaciones internacionales sólidas”.
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