El selectivo Nikkei cerróa casi sin variaciones una volátil
jornada que imitó el comportamiento de Wall Street. El principal índice
asiático concluyó finalmente con un leve recorte del 0,05%, hasta los 13.849
puntos, en línea con el comportamiento del índice regional MSCI Asia-Pacific.
El precio del petróleo continuó con su escalada alcista que
se prolonga ya durante tres jornadas y alcanzó los 136,84 dólares por barril
pese a que Arabia Saudí anunció ayer que tiene capacidad para aumentar hasta
los 15 millones de barriles diarios (aunque de momento no lo haga). El
incremento del precio del oro negro propició las compras en los valores
relacionados con las materias primas y compensó las posiciones que los
inversores deshicieron en las compañías exportadoras.
Sin embargo los productores de acero japoneses cotizaron a
la baja después de que Baosteel Group, el mayor productor de acero de China,
acordara ayer con la australiana Río Tinto pagar hasta un 97% más por el
mineral de hierro australiano, es decir, casi duplicar su precio. Mitsubishi,
que obtiene más de la mitad de sus ganancias de las 'commodities', ha rebotado
un 2% cosechando su mayor ganancia en una semana. Sin embargo, Nippon Steel, la
segunda mayor acerera del país, y JFE Holdings recortaron un 2,% y un 2,18%,
respectivamente y condujeron al resto del sector a mínimos de seis semanas.
En el mercado de divisas el dólar ganó la partida al yen a
la espera de la reunión de la Reserva Federal que ofrecerá mañana su veredicto
sobre tipos de interés. Se apreció un 0,19%, hasta los 108,05 yenes. Honda
aprovechó el tirón de la divisa estadonidense para llenarse los bolsillos de
dinero con concluír con ganancias del 2,7%. Mazda Motor logró ascensos del
0,9%. Por el contrario Toyota, el mayor fabricante de coches de Japón, ha
terminado la sesión con pérdidas del 1% después de anunciar en su Junta de
Accionistas que estudia aumentar en un 17% el salario de sus directivos después
del registrar un beneficio histórico el pasado año fiscal.
Las pérdidas pretendían ser la tónica dominante del sector
financiero después de que dos de las mayores entidades de Estados Unidos,
Citigroup y Goldman Sachs, anunciaran una nueva oleada de despidos, pero
finalmente la primera y la segunda entidad niponas libraron escaparse de ella.
Mitsubishi UFJ terminó un 0,1% arriba, mientras que Mizuho Financial se anotó
un 0,37%. Sumitomo Mitsui Financial Group sucumbió a los temores de sus
homólogas estadounidenses y recortó un 0,35%.
Los mayores recortes de los 225 valores que componen el índice
tokiota fueron para Chugai Pharmaceuticals que concluyó la jornada con un
descenso del 3,84% después de que la farmacéutica Roche haya aumentado su
participación en ella del 50,1% al 59,9% tras el éxito de la oferta pública de
adquisición de acciones iniciada el pasado mayo. Las caídas también estuvieron
motivadas por el jarro de agua fría que Credit Suisse y JPMorgan Chase le
arrojaron al recortar el rating de la unidad japonesa de Roche.
Otro de los valores protagonistas de la sesión fue la aerolínea
Japan Airlines (JAL) que se apreció un 2% tras señalar que realizará una prueba
de vuelo con un avión en la que utilizará junto al carburante habitual un
biocombustible procedente de una mezcla de algas. Furukawa Electric fue, sin
embargo, la empresa más alcista de la jornada y concluyó con rebotes superiores
al 8%.
En el resto de bolsas de la región la tendencia fue mixta.
El Hang Seng de Hong Kong perdió un 0,27%, mientras que el índice autraliano
S&P/ASX se anotó un 0,12%, el mismo porcentaje que cedió el Singapore
Straits Times. El índice regional MSCI Asia-Pacific terminó un 0,2% abajo y
encadenó su cuarta sesión en rojo.