La producción mundial de cereales caerá en
2009 respecto al año pasado, según el último informe Perspectivas de
Cosechas y Situación Alimentaria presentado hoy por el organismo de
la ONU para la Agricultura (FAO), que no precisa el porcentaje.
Según esta organización este año se reducirán la superficie
cultivada de cereales, sobre todo en Europa y Estados Unidos, a pesar de que
las condiciones serán favorables, debido al fuerte descenso de
beneficios en las explotaciones.
Los problemas climatológicos en Asia hacen prever que la cosecha
de trigo en dicha región se verá afectada, sobre todo a causa de las sequías
en China y la India. Este mismo problema afectó el año pasado a la producción
Argentina, un país con una gran producción de cereales.
La FAO prevé que las reservas de cereales a nivel mundial
aumentarán hasta los 496 millones de toneladas entre éste año y el
que viene. Sin embargo, los precios permanecerán altos en muchos países en
desarrollo, lo que afectará a los grupos de población con ingresos
bajos.
A pesar de la relativa bajada de precios en la segunda mitad del
año pasado, en Sudamérica y Centroamérica los precios han seguido
subiendo en los últimos meses.
El organismo de la ONU recuerda que 32 países de todo el mundo
permanecen en crisis alimentaria, con especial incidencia en África
oriental, donde 18 millones de personas están en grave seguridad
alimentaria a causa de las guerras y problemas atmosféricos. En África meridional esta situación afecta a casi 9 millones de
personas.
La FAO prevé, asimismo, que en el año comercial 2008/09 se
utilizarán más cereales para producir biocombustibles, en total 104
millones de toneladas, un 22% más que la cantidad estimada
que se destinó a este uso en el año comercial 2007/08. Esta cantidad supone un 4,6% de la producción mundial
de cereales.
Las previsiones indicaban un incremento aún más rápido en el uso
del maíz para la producción de biocombustibles, pero la reducción en
el precio del petróleo y la crisis económica han reducido estas
expectativas.