El primer ministro de Letonia, Ivars Godmanis,
recortó hoy en un 15% su salario y el de los empleados de
su Secretariado, como respuesta a la grave situación económica en
ese país báltico, uno de los más afectados por la crisis financiera.
Godmanis redujo su salario de 2.385 lats a 2.027 lats (de US$4.700 a
US$4.054) y en otro tanto la remuneración de la mayor parte de
sus trabajadores, informó a la prensa en Riga el portavoz del jefe
del Gobierno letón, Edgars Vaikulis, según la agencia Baltic News
Service.
De hecho, los emolumentos se reducirán en un 20%, pues
Godmanis y sus empleados a partir de ahora tampoco cobrarán primas,
pagas por vacaciones y aguinaldos, precisó.
Letonia es el Estado de la Unión Europea (UE) más afectado por la
crisis global y que sufre la mayor recesión: en el tercer trimestre
del año pasado el Producto Interior Bruto (PIB) del país se redujo
en un 4,6%, en comparación con el mismo período de 2007.
El Gobierno letón diseñó un plan anticrisis y de estabilización
económica que prevé recortar el gasto público en un 15%,
congelar los salarios y subir los impuestos, proyecto que suscitó
duras críticas de la oposición y los sindicatos.
Riga fue el pasado día 13 escenario de graves desórdenes, después
de que unas 20.000 personas se manifestaran en el centro urbano
contra las medidas del Gobierno encaminadas a paliar el impacto de
la crisis financiera y reclamaran la disolución del Legislativo.
Al menos diez policías y medio centenar de manifestantes
resultaron heridos y 106 personas fueron detenidas en esos
disturbios, cuando cerca de un millar de manifestantes apedrearon la
sede del Parlamento.
Por su parte, el pasado día 20 los ministros de Finanzas de la UE
(Ecofin) aprobaron formalmente conceder un crédito de 3.100 millones
de euros (US$4056 millones) a Letonia para contribuir a la superación de la crisis
financiera.
Ese préstamo forma parte de un paquete en el que participan
también el Fondo Monetario Internacional (1.700 millones de euros),
el Banco Mundial (400 millones de euros), Suecia, Dinamarca, Finlandia y
Noruega (1.800 millones de euros entre los cuatro) y otras entidades y
países.
En total, las autoridades letonas obtendrán una ayuda de 7.500
millones de euros (US$9.800 millones) de aquí al primer trimestre de 2011, con un plazo
máximo de madurez de siete años.
La economía letona ha mostrado en los últimos meses signos de
debilidad, debido a los desequilibrios relacionados con la deuda
exterior, el aumento del déficit y el débito público y la elevada
inflación.