El Gobierno de Evo Morales tiene listo el
plan para nacionalizar las empresas generadoras y de transporte de
electricidad de Bolivia, un sector controlado actualmente por
compañías francesas, españolas, británicas y bolivianas, informaron
hoy fuentes oficiales.
El nuevo ministro de Hidrocarburos y Energía, Óscar Coca, recibió
este lunes de manos de su antecesor, Saúl Ávalos, "la estrategia
para la nacionalización de las generadoras y la transportadora
eléctrica que en su momento pertenecía a la (estatal) Empresa
Nacional de Electricidad (ENDE)".
En 1995, en el marco de un proceso de privatización, ENDE fue
dividida en varias empresas que se vendieron parcial o completamente
a trasnacionales que controlan desde entonces gran parte de la
generación, transmisión y comercialización de la electricidad en el
país.
Esa privatización se produjo durante el primer Gobierno de
Gonzalo Sánchez de Lozada (Movimiento Nacionalista Revolucionario,
MNR, derecha).
Las mayores generadoras de electricidad son Corani, participada
en un 50% por Ecoenergy International, subsidiaria a su
vez de la francesa GDF Suez, y Guaracachi, donde la británica
Rurelec PLC posee la mitad de sus acciones.
La generadora Valle Hermoso tiene como socia también, en un 50%, a la empresa The Bolivian Generating Group, que pertenece a
la firma inversora Panamerican de Bolivia.
Las tres compañías generadoras, según datos de la Bolsa Boliviana
de Valores, también están participadas entre un 47% y 49%
por dos gestoras de pensiones, una del grupo español Bilbao Vizcaya
Argentaria y otra por del grupo Zúrich.
Estas acciones pertenecen a los ciudadanos bolivianos, pero su
administración fue delegada por el Estado a las dos gestoras de
pensiones en la década pasada.
La otra empresa que puede ser afectada por la nacionalización del
sector es la Transportadora de Electricidad, cuya casa matriz es Red
Eléctrica de España (REE), que controla el cien por ciento de las
acciones.
"El Gobierno tiene la firme decisión de recuperar de nuevo, tanto
la generación como la transmisión (eléctrica) para los bolivianos.
La estrategia está elaborada y ha sido oportunamente trabajada y
entregada al presidente de la República", remarcó Ávalos.
En Bolivia también operan otras internacionales del sector, como
la española Iberdrola, en la distribución eléctrica, si bien Ávalos
no citó esta área como parte del plan nacionalizador.
El nuevo ministro de Hidrocarburos y Energía Óscar Coca dijo a
los periodistas que analizará la documentación que le ha entregado
Ávalos y que antes de fin de semana se referirá al tema.
A principios del año, el presidente Morales ratificó su intención
de concretar la nacionalización de los sectores eléctrico y
ferroviario, si bien admitió una falta de recursos económicos para
encarar estos procesos.
Morales ha "nacionalizado" el área de hidrocarburos con un pacto
de compra de acciones de las empresas trasnacionales petroleras.
Pero además su Gobierno mantiene un conflicto legal en el caso de
una fundidora minera expropiada a la suiza Glencore y otro con la
intervención de la telefónica Entel, cuyo accionista mayoritaria era
la italiana Telecom que ha presentado un arbitraje contra el Estado
boliviano.