El principal índice bursátil japonés ha cerrado la primera
sesión de la semana con un fuerte descenso del 1,82%, hasta 12.834,18 puntos,
debido al mal comportamiento de las compañías exportadoras, con especial
mención para el sector tecnológico. Por su parte, el Topix ha cedido un 1,92%,
hasta 1.230,64 enteros.
La mayor caída porcentual sufrida por el Nikkei desde el
pasado 19 de agosto ha sido consecuencia de una ligera revalorización del yen y
del miedo a una caída en la inversión en empresas tecnológicas desatado el
viernes por el fabricante de ordenadores Dell.
Kyocera y Tokyo Electron han sido dos de los valores del
sector que más han acusado este temor y han caído un 2,6% y un 3,4%,
respectivamente.
Entre los grupos automovilísticos, Honda y Toyota se han
dejado un 3,4% y un 2,2% después de que el yen se apreciara frente al dólar,
alcanzando un cambio de 108,53 yenes.
El sector bancario también se ha visto afectado por la
tendencia negativa del mercado nipón. Mitsubishi UFJ ha cedido un 1,8%,
mientras que Mizuho Financial y Sumitomo Mitsui Financial han perdido un 1,9% y
un 2,4%, respectivamente.
Pocas noticias en el terreno negativo, donde ha sobresalido
Citizen Holdings, que ha despuntado un 8.7% tras anunciar un programa para
recomprar el 9,5% de su capital.
También ha escapado de la inercia negativa Nintendo, que ha
sumado un 3,7% gracias a la demanda de uno de sus productos estrella, la
consola de videojuegos 'Wii'.