Las preocupaciones sobre la marcha de la economía
estadounidense continúan salpicando el resto de mercados del mundo. Los
recortes con los que cerró ayer Wall Street, que espera hoy con impaciencia el
veredicto de la Fed sobre tipos, viajaron hasta los mercados asiáticos.
La debilidad de la primera economía del mundo que ayer se
hizo patente una vez más al conocerse una bajada de la confianza del consumidor
mayor de lo esperado, la caída del precio medio de las viviendas de Estados
Unidos, el ya habitual repunte del petróleo y una ligera apreciación del dólar
frente al yen (se cambió a 107,94 unidades), fue todo un cóctel explosivo que
viajó hasta los mercados asiáticos.
Allí el principal indicador, el selectivo Nikkei de la Bolsa
de Tokio, ha concluido su quinta jornada consecutiva a la baja, con un descenso
del 0,14%, hasta los 13.829 puntos, situando su cota en el nivel más bajo de un
mes. El mayor lastre lo han sufrido las compañías exportadoras como Toyota que
cedió un 1,3% ante las preocupaciones derivadas por la marcha de la economía
estadounidense y, por extensión, las inmobiliarias.
Pero la tendencia bajista se generalizó en el resto de
mercados asiáticos que también encadenaron recortes por quinta sesión
consecutiva debido, principalmente, al desplome de las compañías mineras tras
el acusado descenso del precio de las materias primas y al del sector
financiero, que fue el que notó más de cerca las turbulencias financieras
llegadas de Estados Unidos.
La minera australiana BHP Billiton cedió cerca del 5%
presionada por los recortes del precio del zinc, del cobre y del níquel, una
caída poco significativa teniendo en cuenta el desplome del 11% que sufrió la
financiera Aiful en la bolsa de Tokio. Aiful experimentó su mayor recorte en
una década tras el jarro de agua fría que le arrojó Lehman Brothers al indicar
que podría ser insolvente.
El indicador regional MSCI Asia-Pacific terminó con
descensos del 0,3% que sumados a los de las cinco jornadas anteriores suponen
un saldo negativo del 4,3% que amplía sus recortes desde comienzos del año al
12%. Las plazas de Hong Kong permanecieron cerradas a consecuencia del tifón
Fensheng. El índice chino CSI 300 navegó a contra corriente y se apreció un
espectacular e inesperado 4,1% después de que el diario 'China Securities
Journal' apuntara que China Life Insurance ha estado investigando "grandes
cantidades" en mutualidades.