En un inédito punto de prensa convocado la mañana de este lunes, la presidenta del Banco Central, Rosanna Costa, quiso “compartir cómo estamos mirando desde el Banco Central los anuncios sobre aranceles recíprocos impuestos por Estados Unidos el día miércoles de la semana pasada”.
“En primer lugar, es importante establecer que lo que ha ocurrido en los últimos días es un shock significativo para la economía mundial. No tenemos precedentes cercanos de situaciones de esta naturaleza”, dijo la timonel del Consejo.
“Es evidente que medidas que impliquen un retroceso en los flujos de comercio son costosas para el mundo”, agregó la autoridad.
“El libre comercio ha sido un motor relevante para el crecimiento a nivel global, por lo que medidas que traben el comercio tienen efectos negativos de mediano plazo, y para una economía pequeña y abierta como la nuestra ello es especialmente importante”, dijo la presidenta.
Sobre la magnitud de los efectos de estas medidas, Costa dijo que “es todavía temprano para poder establecerlo”.
Y explicó que existen distintos canales de transmisión, y que en lo más inmediato sus efectos se transmiten a través de los canales financieros. “La reacción de los mercados ha sido negativa y de una magnitud importante y estamos monitoreando su evolución”, aseguró la economista.
“En Chile el tipo de cambio aumentó, las tasas de interés de corto plazo y largo plazo se redujeron y la bolsa cayó. Algo similar ocurrió en la mayor parte de las economías”, añadió Costa.
“Hay otros impactos que son menos inmediatos y que fluyen a través de los canales de comercio. El flujo de exportaciones a Estados Unidos, nuestra participación en las cadenas de valor y también los efectos que tenga esta situación en la demanda de otros países por nuestros productos”, planteó la autoridad.
Costa enfatizó en que “es todavía temprano para extraer conclusiones”.
“Los efectos financieros han sido significativos y es preciso ver cómo decantan y cómo se absorbe el shock que estamos viviendo. Los efectos comerciales se irán viendo con el paso del tiempo”, mencionó también la presidenta del instituto emisor.
Y subrayó que “es importante que este shock se absorba, que se haga de forma natural. Los precios tienen que ajustarse a las nuevas circunstancias y los mercados están en ese proceso”.
“Estamos en un entorno de alta incertidumbre. No es posible anticipar si el escenario avanzará hacia un proceso negociado o uno con represalias que profundicen los efectos negativos sobre el comercio global y el crecimiento. Hemos visto señales en ambas direcciones”, añadió.
“En el Banco Central estamos siguiendo muy de cerca los desarrollos de este escenario mundial y nos vamos a mantener atentos a sus efectos en los mercados, en nuestra economía y ciertamente las perspectivas para la inflación”, cerró la economista.