El Banco Interamericano de Desarrollo
(BID), la Corporación Andina de Fomento (CAF) y el Fondo
Latinoamericano de Reservas anunciaron hoy que pondrán a disposición
de los gobiernos de Latinoamerica US$10.700 millones para
combatir la crisis financiera.
Además, el Banco Mundial indicó que está dispuesto a doblar sus
préstamos para la lucha contra la pobreza en América Latina, que
este año sumaron US$5.000 millones, como una forma de paliar
los efectos de la crisis.
"Estamos reaccionando hasta el techo de lo que podemos hacer.
Aquí ponemos todo lo que tenemos en el asador", dijo en una rueda de
prensa el presidente del BID, Luis Alberto Moreno.
Ese organismo proporcionará la mayoría de los fondos para el
combate contra la crisis en el terreno financiero, 6.000 millones de
dólares, mientras que la CAF tendrá disponibles 2.000 y el Fondo de
Reservas otros 2.700 millones, indicaron sus máximos directivos
reunidos en Washington.
La iniciativa responde a los llamamientos de algunos países
latinoamericanos, que ven con preocupación la falta de liquidez en
los mercados y la aversión al riesgo de los inversores, lo que ha
provocado una salida del capital extranjero.
Las entidades han respondido en cuestión de días con su oferta
extraordinaria de fondos, que se unirá a una subida de sus
presupuestos para préstamos normales el próximo año.
Los Gobiernos latinoamericanos no tienen una necesidad imperiosa
por ahora de obtener financiación externa, pero sus empresas sí se
resentirán inmediatamente del cierre del grifo del capital
extranjero, según el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El dinero del BID, canalizado en el llamado Programa de Liquidez
para el Sostenimiento del Crecimiento, estará destinado a dar
capital a los bancos, de forma que no se vean obligados a cortar las
líneas de crédito a las empresas.
"Se trata de la mayor iniciativa del BID de este tipo en casi 50
años", dijo Moreno. Inicialmente, esa institución limitará el acceso
a ese fondo a 500 millones de dólares por país.
Además de ese programa, en el 2009 el BID pretende aprobar
préstamos para proyectos sociales en América Latina por valor de
12.000 millones de dólares, lo que supondría un incremento del 20
por ciento con respecto al año pasado.
El Banco Mundial, por su parte, ha ofrecido canalizar
"rápidamente" fondos nuevos a programas de préstamos ya establecidos
con los países de la región, de forma que se mantengan las ganancias
sociales de los últimos años, explicó una fuente del organismo.
Algunos países ya le han solicitado ayuda adicional, en vista del
empeoramiento del entorno externo, con una caída de las remesas, de
los precios de las materias primas y de la demanda de productos
latinoamericanos en general.
El terremoto en el sistema financiero de los países desarrollados
ha eliminado algunas de las líneas de crédito a la exportación,
debido a que los inversores se han vuelto alérgicos al riesgo o
simplemente porque los bancos que las ofrecían se han colapsado,
explicó el presidente ejecutivo de la CAF, Enrique García.
La Corporación usará 2.000 millones de dólares para garantizar
que los bancos latinoamericanos tengan suficientes fondos para
llenar ese vacío.
Por último, el Fondo Latinoamericano de Reservas está dispuesto a
aumentar en los próximos meses en 2.700 millones de dólares su línea
de crédito actual, de 1.800 millones, para bancos centrales de la
región que se topen con problemas en la balanza de pagos.
Los recursos anunciados hoy no servirán para la intervención en
los mercados cambiarios, aclaró el BID.