Con extremo cuidado preparan en la Moneda el viaje a China que realizará el presidente Sebastián Piñera a fines de abril o principios de mayo. Un país que se ha vuelto clave para Chile en el actual escenario de incertidumbre internacional, tanto por la guerra comercial que ha entablado contra EEUU, como por las millonarias inversiones que han realizado y siguen planificando en nuestro país -Tianqi, grupo Joyvio y el tren a Valparaíso son sólo una muestra-, y por el impacto que genera en nuestras exportaciones cualquier variación del PIB chino.
El comercio entre ambos países creció 24% en 2018, alcanzando los US$42.791 millones, lo que representa más del 30% del comercio exterior de Chile. El intercambio con nuestro segundo socio comercial, EEUU, alcanza los US$24.268 millones.
Por ello, el gigante asiático será parada obligada para el Presidente, que al igual que en su gobierno anterior será recibido por el embajador de nuestro país en esa nación, Luis Schmidt Montes, quien nuevamente ostenta ese cargo y que en esta entrevista anticipa los preparativos de la gira que contempla una reunión con el presidente Xi Jinping, además de actividades en Beijing y posiblemente otra ciudad.
-China es nuestro mayor comprador de cobre
-Efectivamente, las exportaciones de Chile a China crecieron 32% en 2018, debido fundamentalmente a los sectores mineros -principalmente el cobre-, alcanzando los US$ 20.016 millones. China nuevamente es el mayor comprador de cobre para Chile. También el sector agrícola aumentó sus envíos en más de 50% respecto a 2017 con más de US$4.710 millones, apoyado fuertemente por el sector frutícola que creció más de 74% (por el fuerte aumento de las cerezas), las carnes, los vinos, productos del mar y forestales.
-¿Qué se espera de la visita del presidente a China?
-La visita de Estado del presidente Sebastián Piñera es de gran trascendencia, tanto por el momento que experimenta la relación entre ambos países, como por la invitación especial que le hizo el presidente chino como invitado estelar al foro de la Ruta y la Seda.
Esta es mi segunda vez en organizar en conjunto con la Cancillería una visita de Estado para el presidente Piñera, donde reforzaremos nuestra Asociación Estratégica Integral, impulsaremos el profundizamiento de nuestro TLC remozado con China -que empezó a operar ahora en marzo-, e incluiremos los temas APEC donde Chile es país sede y en que el presidente Xi Jinping ya confirmó su participación para noviembre. Por último, echaremos las bases para la celebración y consolidación de los 50 años de relaciones diplomáticas que se cumplen en 2020.
-¿Qué productos chilenos son los preferidos por los chinos?
-La proyección de los productos a China se ve bien auspiciosa: los minerales y el cobre -de no desacelerase el crecimiento de China (6,5%)- seguirá creciendo y la demanda por alimentos chilenos también, debido a la fuerte demanda por alimentos en China dado el mayor crecimiento económico de la población, disminución de la pobreza, occidentalización de sus costumbres y donde los consumidores chinos piden productos más sanos e inocuos. En esto Chile tiene claras ventajas. Además del crecimiento de la población, hay una disminución importante del terreno cultivable en China. En 1990 era 12%, hoy sólo es el 6% existiendo una disminución muy importante. Esto está provocando que las importaciones de alimentos estén creciendo a tasas de más de 10% en los últimos 10 años, y Chile puede seguir aprovechando esta coyuntura y seguir creciendo por el solo hecho del aumento de la demanda china, lo cual además se ve beneficiado por la calidad de nuestros productos, lo que está siendo muy valorado por el consumidor chino y el acuerdo comercial, TLC, que nos ayuda a ingresar con aranceles cero.
-¿Hemos diversificado nuestros productos más allá del vino y el pescado?
-Si, efectivamente Chile ha diversificado sus envíos. Un caso emblemático es el de las cerezas. En 2010 se exportaron a China US$3 millones y esta temporada más de US$850 millones (85% de la producción chilena se exporta a China); el salmón en 2010 era prácticamente desconocido en China y el año pasado se exportaron US$278 millones. Así también la carne de cerdo, los arándanos y las paltas. Para el vino China se ha transformado en nuestro mercado más importante con más de US$250 millones. Recuerdo también en mi primer periodo como embajador la entrada de las vacas y vaquillas que generaron ingresos para Chile de más US$36 millones en su primera exportación, por lo que la diversificación es constante y diversa.
-¿Qué temas marcarán la agenda más allá de la pugna comercial?
-Dentro de los planes futuros está abrir un consulado y una oficina comercial en el interior de China, probablemente en Chengdu, capital de la provincia de Sichuan, la cual se está transformando en un gran polo de desarrollo al interior de China, con una gran zona de libre comercio, nuevo aeropuerto internacional, la mayor estación de trenes rápidos de China, mejores carreteras, vías de comunicación y un gran centro tecnológico. Por último debemos avanzar en poder sacar adelante la agenda agrícola con nuevos productos al mercado chino como son las peras, cítricos, alfalfa, caballares, frutas congeladas y habilitación de nuevas plantas de procesos.
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