Evelyn Matthei y mitigaciones de Costanera Center: “Lo que va a primar es estrictamente dinero”

“Lo que va a primar es estrictamente dinero”. Sin rodeos, la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, se refirió ante el concejo municipal respecto de las mitigaciones que debe realizar Cencosud para destrabar la recepción final de las torres de oficinas del complejo Costanera Center, que permitirían la apertura completa del rascacielos.

A principios de año, la empresa liderada por Horst Paulmann informó a las autoridades su opción para reducir las medidas de mitigación aprobadas por el Estudio de Impacto Vial (Eistu) el 2009. A instancias de la actual administración de la comuna de Providencia, se estableció una nueva mesa de trabajo que está evaluando reemplazar las obras que el retailer tiene comprometidas, como el túnel bajo la avenida Andrés Bello, entre Suecia y Tajamar.

La tarea es compleja, por cuanto las obras son requisito para poder inaugurar la Gran Torre Costanera y cumplir la meta de abrir antes de fin de año las oficinas y el hotel que conforman el otro edificio del recinto.

Para la empresa dueña de los supermercados Jumbo, hay varias medidas aprobadas en el Eistu que no serían necesarias.

“Ya no es tema, porque no se necesita (el túnel). Normalmente, los estacionamientos están medio vacíos”, dijo Paulmann en noviembre de 2014.

Además, como parte de la ampliación del Costanera Center, que involucran a dos subterráneos y adaptaciones menores en cinco de los pisos sobre terreno, los 5.695 espacios de estacionamiento actuales bajarían a 4.761, de los cuales sólo 3.300 están habilitados considerando las etapas de mitigación vial que la compañía ya ha ejecutado.

Dado esto, Cencosud busca eliminar algunas obras, principalmente el tan mentado túnel.

Sin embargo, la alcaldesa Matthei fue categórica. En el concejo municipal del pasado 25 de julio, la autoridad fue consultada respecto al presupuesto asociado a las obras de mitigación que debe realizar Cencosud, dado que algunas de las obras que restan por concretar no serían eficientes, lo que motivaría su reemplazo por trabajos asociados a movilidad peatonal.

“Lo único que preocupa es saber si en términos de presupuesto va a ser lo mismo o no, porque peatonizar una calle es muchísimo más barato que hacer el par vial de Sánchez Fontecilla con Tobalaba, por ejemplo, y que si no se hace, bien que no se haga, pero que se invierta entonces la misma cantidad de dinero en mejoras peatonales”, dijo el concejal Tomás Echiburú, según el acta de concejo.

La alcaldesa Matthei respondió: “Se han dado como no rentables y no posibles las simulaciones de los elementos que estaban en el Eistu original; se ha trabajado muy fuertemente con el Seremi de Transporte, se ha visitado también a la Ministra de Transporte y también de la Vivienda (…). Lo que va a primar es estrictamente dinero. Si ellos tenían esta cantidad de estacionamientos aprobados y eso conllevaba una cierta cantidad de obras de mitigación, eso significaba cierta cantidad de dinero. Si bajaron en un 10% los estacionamientos, se bajará en un 10% el dinero. Nada más”, dijo la autoridad comunal según el acta.

El concejal Echiburú insistió, señalando que, según sus antecedentes, la compañía va a reducir en 20% el número de estacionamientos con la ampliación del centro comercial.

Frente a esto, Matthei dijo: “Lo que querían (Cencosud) era rebajar todo el túnel y eso es harto más que el 10% o el 20% de las obras finales, y eso es lo que no se les permitió de ninguna manera. Lo que corresponde es que las mitigaciones sean por el número de estacionamientos, eso es lo que dice la ley”.

Negociaciones

Cencosud no quiso referirse a las declaraciones de la alcaldesa Matthei. La empresa nunca ha cuantificado el valor de las mitigaciones; menos del túnel, pero se estima que estaría en torno a los US$ 30 millones.

Actualmente está en funcionamiento una mesa de trabajo con las entidades que conforman el Sistema de Ventanilla Única de Evaluación.

El grupo que fue convocado y lidera la propia alcaldesa Matthei con el objetivo de “cambiar el eje” de las mitigaciones y adaptarlas a la realidad actual de la zona de influencia del complejo comercial.

Lo anterior, porque habría quedado demostrado que el flujo que recibe el complejo Costanera Center es fundamentalmente peatonal y no vehicular como se estimó a la hora de definir las mitigaciones.

Lo que se está analizando son proyectos que reemplacen estas obras y que vayan en línea con los planes de desarrollo del municipio, los que apuntarían a sacar los autos de la comuna, fomentando la movilidad peatonal y de medios de transporte sin motor, así como las áreas verdes.