Trabajador que recibió sueldo de $165 millones por error: formalizado y con alzamiento del secreto bancario

Hace poco más de un año, Diario Financiero reveló un insólito caso al interior de la empresa Consorcio Industrial de Alimentos (Cial): un trabajador, cuyo sueldo era de unos $ 500 mil, recibió nada menos que $ 165 millones en su cuenta corriente por error.

La empresa -que maneja las marcas San Jorge, La Preferida y Winter, y es de propiedad de Alberto Kassis- se querelló en contra del que fuera uno de sus funcionarios por el delito de apropiación indebida.

Actualmente, el querellado está formalizado, con arraigo nacional y la justicia dio luz verde para el alzamiento del secreto bancario de su cuenta corriente, lo que se encuentra en proceso de concretarse.

Alejandro Díaz es defensor penal privado y durante el proceso ha insistido: “El asunto discutido, sus características, el objeto que se persigue, deben ser buscados en sede civil. La conducta de mi representado, aunque fuera cuestionable, no constituye un delito”.

El tribunal rechazó la solicitud de sobreseimiento definitivo de la causa a petición de la defensa del imputado. Además, el Ministerio Público y el querellante pidieron el alzamiento bancario de la cuenta corriente del querellado, lo que fue autorizado.

Todo partió luego que, en el proceso de depósito de los sueldos a los trabajadores del mes de mayo del año pasado, algo pasó que terminó en un millonario pago a quien no correspondía.

Según la querella, el trabajador fue advertido de que se le había transferido en exceso a su cuenta corriente $ 165.398.851.

“Se le informó y aclaró que ese dinero no correspondía al pago de ningún servicio”, dice la acción judicial, en la cual se señaló que el querellado debía ir a su banco para generar un vale vista a nombre de Cial.

El trabajador se comprometió a ir a su banco, temprano. Pero pasaban las horas; hubo llamados telefónicos y mensajes de WhatsApp, y recién a las 11:00 hubo respuesta: que se levantó tarde y que iría a solicitar el vale vista más tarde. Fue el último contacto de la empresa con el trabajador. Hasta el 2 de junio de 2022, cuando -a través de su abogado- hizo entrega de su carta de renuncia voluntaria a la compañía.