La cumbre de jefes de Estado y Gobierno
de la Unión Europea (UE) aprobaría la creación de una "célula de
crisis financieras" como mecanismo de alerta e intercambio de
información entre los países comunitarios y las instituciones,
indicaron hoy fuentes comunitarias.
Los países de la UE podrían acudir "en cualquier momento" a la
célula, la que asegurará la información "inmediata y confidencial" a
los responsables comunitarios, según el último borrador del texto de
conclusiones de la cumbre aprobado hoy por los Veintisiete.
El grupo, asegurará una "buena coordinación" y sugerirá "una
reacción común" si fuera necesario.
La información será trasladada inmediatamente a la presidencia de
turno de la UE, el presidente del Banco Central Europeo (en
coordinación con los demás bancos centrales), el presidente de la
Comisión y el presidente del Eurogrupo.
La cumbre comunitaria, que comienza mañana y concluye el jueves,
pedirá en su documento de conclusiones que el Consejo concluya "lo
antes posible" las modalidades prácticas y de funcionamiento de esta
célula de gestión de crisis, añade el documento.
La creación de esta célula sigue a la cumbre de líderes de la
zona euro del pasado domingo en París, cuyo comunicado final confió
en que la cumbre comunitaria apruebe "un mecanismo para la gestión
de crisis entre los países europeos".
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso,
explicó hoy que el objetivo de la célula es que si se produce una
crisis o un problema financiero inesperado "los países saben a quién
llamar" durante las 24 horas del día sin tener que esperar a la
próxima reunión de ministros de Finanzas.
El objetivo del grupo es que si se produce una crisis o un
problema financiero inesperado "los países saben a quién llamar"
durante las 24 horas del día sin tener que esperar a la próxima
reunión de ministros de Finanzas, explicó Barroso en su habitual
conferencia de prensa previa a las cumbres comunitarias.
"La verdad es que hemos tenido que improvisar" en las últimas
semana, reconoció Barroso, quien recordó que "día y noche, con
frecuencia de noche y normalmente los fines de semana, hemos tenido
que afrontar problemas de urgencia sobre el salvamento de bancos
transfronterizos".
Barroso insistió en que "la verdad es que no tenemos un sistema
europeo de supervisión" de instituciones financieras, "ni siquiera
un sistema de coordinación estable entre los supervisores
nacionales".