Luego de meses de cuarentenas y cierres para contener el avance del coronavirus entre la población, países de todo el mundo están diseñando sus planes de reapertura económica, en los que según la naturaleza nacional se elige priorizar algunos sectores por sobre otros.
El debate sobre cuándo y cómo retomar las clases suspendidas para evitar el aumento de casos de coronavirus se ha dado en todo el mundo, y Chile no ha sido la excepción. Y mientras algunos han optado por comenzar reabriendo el comercio, también hay quienes, al diseñar la "nueva normalidad" han priorizado la educación.
Las directrices son diversas y responden a la realidad de cada país, pero algunas de las preferidas por los gobiernos parecen ser la exigencia de distanciamiento social, garantizar la limpieza y/o desinfección de las personas y mobiliario y alternar entre clases presenciales y virtuales.
Pero tópicos en los que hay menos consenso es, por ejemplo, quiénes comienzan a retomar las actividades primero. Por lo mismo, cabe preguntarse, ¿cómo lo están haciendo los países que decidieron autorizar la vuelta a clases?
Dinamarca: El primer occidental en volver a clases
El 15 de abril Dinamarca se convirtió en el primer país occidental en volver a clases, para lo que desarrolló un sistema de monitoreo para detectar nuevas infecciones e identificar de dónde provienen, para así evitar un nuevo brote. El 15 de abril reabrieron los niveles preescolares y primarios, con una jornada escolar más corta -de 8 de la mañana a 1 de la tarde-, nuevos lineamientos de limpieza, distancia entre pupitres, horarios de recreo diferenciados y limpieza de superficies cada dos horas, entre otros lineamientos comunes para estudiantes de todas las edades.
Un mes después siguieron las escuelas secundarias, con alumnos de 12 a 16 años, y a los que se permitió que cada escuela interpretara las guías según sus necesidades. El 27 de mayo los jóvenes de 16 a 19 años regresaron con directrices similares, pero con la garantía de que para los de último año se llevarán a cabo los exámenes finales, pero serán menos que de costumbre.
Singapur: Prioridad para graduados y clases a distancia cada dos semanas
Desde el martes 2 de junio Singapur está intentando retomar actividades, y uno de los sectores elegidos fue la educación. La prioridad estará puesta en los estudiantes que cursan su último año escolar, quienes volverán a los colegios a tiempo completo. Pero los alumnos de primaria y secundaria recibirán educación desde sus casas cada dos semanas, mientras que los centros de educación preescolares y de educación especial se abrirán por fases. Todos los mayores de 2 años, incluidos los profesores, deberán usar mascarillas y se realizan constantemente controles de temperatura y desinfección de manos.
Noruega: Menos niños por cada adulto
El país nórdico fue uno de los primeros en retomar las actividades educacionales, con las que de hecho comenzó su proceso de reapertura. A mediados de abril, los jardines infantiles de Noruega volvieron a recibir estudiantes luego de cinco semanas de confinamiento, pero para operar, se debían cumplir estrictas medidas. Hasta los tres años los grupos de trabajo son de tres niños con un adulto responsable, mientras que entre los tres y seis años, los grupos son de hasta seis niños con un profesional de la educación a cargo.
Uruguay: Pioneros en la región
A nivel latinoamericano, Uruguay fue el primero en retomar las actividades escolares, las comenzaron a volver el 1 de junio en un programa de tres etapas. En la primera, se autorizó a escuelas rurales, especiales y de último año secundario excepto en Montevideo. La segunda fase comenzará el 15 de este mes y permitirá que la mayoría de las escuelas primarias -excepto en la capital- y las de último año restantes, vuelvan a las aulas. Y la tercera etapa, que tiene como fecha el 29 de este mes, contempla la apertura para los establecimientos restantes. Mientras dure la emergencia sanitaria la asistencia a clases será voluntaria y las jornadas escolares no podrán superar las 4 horas al día.
Bélgica: Mascarillas para adultos, no para niños
El 2 de junio volvieron a abrir sus puertas los niveles preescolares del país europeo, y este lunes 8 los niños de edades primarias retomaron sus actividades académicas. Para los estudiantes belgas no es necesario el uso de mascarillas, pero las autoridades sí los recomiendan para maestros, auxiliares y otros funcionarios de los colegios.
Los establecimientos educacionales deben garantizar la distancia social entre los alumnos y para los más pequeños solo está permitido jugar en los recreos con sus compañeros de clases, y no con niños de otros cursos. Para los niveles superiores retomar las actividades escolares es una decisión autónoma de las comunidades, pero se incentiva el uso de mascarillas, la priorización de actividades al aire libre y la ventilación de las salas de clases.
Corea del Sur: Preparados para dar marcha atrás
Pese a que la vuelta a clases tuvo que ser postergada por un aumento de casos de coronavirus a mediados de mayo, el 20 del mismo mes los casi 500 mil estudiantes de último año escolar pudieron retomar sus actividades presenciales, mientras que para los alumnos de cursos inferiores se planificó una reapertura gradual, que contempla clases virtuales y en los establecimientos.
El protocolo de vuelta a clases contempla controles de temperatura al ingreso de los recintos educacionales, uso de desinfectantes, reorganización de los pupitres para que mantengan con las medidas de distanciamiento social, estricto lavado de manos, e incluso, saludo de codos. Las autoridades están preparadas, según declaró el Ministerio de Educación, para volver a suspender las clases en las escuelas donde se registre un aumento en el número de contagios.
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