Ocho años lleva Fintual en el mercado de fondos en Chile y también tiene una creciente presencia en México.
De ser una fintech de nicho que salió a conquistar a ingenieros jóvenes, se transformó en lo que su cofundador, Omar Larré, denomina “un banco de inversión digital que está comenzando a competir con los grandes administradores locales”.
En Chile, Fintual tiene 141.464 clientes y US$ 1.167 millones de activos bajo administración. La firma apuesta a seguir impulsando su modelo de negocios y evaluar oportunidades que le permitan expandirse a ligas en las que hoy no están, como el mundo de ahorro previsional obligatorio.
“No tengo claro cuáles van a ser los cobros desglosados por cada uno de los servicios del IPS. Va a ser interesante saberlo, porque ahí uno realmente puede poner los números en la ecuación para definir si este negocio sale o no a cuenta”
Por ahora, ya tienen presencia en ahorro previsional voluntario. De hecho, el 17,5% de los clientes Fintual tienen APV, por el que cobran una comisión de 0,49%.
En entrevista con DF, Larré -quien también es el gerente de inversiones de la firma- abordó las intenciones que tiene Fintual de entrar a competir en el negocio de AFP y los espacios que se abren con la reforma de pensiones para que aparezcan nuevos actores expertos en inversiones.
“Los clientes nos están preguntando. Hay un interés natural de ellos de entender si vamos a entrar o no a la inversión”, dijo.
- ¿Realmente les interesa entrar a competir en el mercado de AFP?
- Tenemos un interés en evaluar primero el negocio, o sea, si tiene sentido entrar a competir. Y segundo, evaluar cómo se viene la normatividad de parte de la Súper de Pensiones, que tiene muchísimo espacio que definir.
Hay muchas cosas en la ley que quedó aprobada que todavía no están definidas y una de las principales es el régimen de inversión. Lo más responsable es decir: nos interesa evaluar de verdad, si vale la pena entrar al negocio y si queremos hacerlo.
- ¿Por qué podría ser interesante para Fintual?
- La administración de fondos de pensiones se alinea bastante con nuestro modelo de negocio. Queremos especializarnos en soluciones de inversión que les sirvan a millones de personas y ya tenemos un producto como el APV, que es voluntario. En este caso sería obligatorio y sería primera vez que entraríamos al negocio obligatorio.
Hay cosas que nos parecen bien interesantes. Una de esas es que el encaje se rebaja y se cambia por otro que tiene que ver con una proporción que es el 30% de los ingresos y eso abre la cancha para entrar a competir más agresivamente con la cartera de afiliados más antiguos.
Licitación por precio
- ¿Cómo ve la licitación?
- No nos gustó tanto que se centrara solo en precio. De hecho, partimos en 2022, a través de la Ley de Lobby hablando con la Superintendencia de Pensiones, la Subsecretaría de Previsión Social y una de las cosas que expusimos, por ejemplo, era que, si iban con la idea de licitar, contemplaran la variable precio, pero también la de atención e inversión o rentabilidad. Quizás el precio podía ser un 70%, 60%, un ponderador más grande.
En definitiva, hay buenas cosas. Se abren puertas, como la baja del encaje, pero todavía hay que evaluar.
- ¿Le parece que el rol del IPS ayudará a que entren nuevos actores?
- Cuando uno se especializa en la gestión de inversión no necesariamente se especializa, por ejemplo, en la recaudación. Entonces, sí. Abre las puertas y da una opción.
No tengo claro -porque todavía no se ha definido- cuáles van a ser los cobros desglosados por cada uno de los servicios del IPS. Va a ser interesante saberlo, porque ahí uno realmente puede poner los números en la ecuación para definir si este negocio sale o no a cuenta.
También va a ser interesante saber qué tan desglosado está. (...) Nos encantaría poder ir a un desglose y decir, por ejemplo, nos interesa el servicio de recaudación, el de pagos y el de sucursales. ¿Por qué? Porque el resto sí lo podemos hacer nosotros.
- ¿Hay otros aspectos que no les convencen de cómo quedó la reforma?
- La ley tenía un espíritu de que entraran más actores a competir y valoramos eso, pero igual hay cosas que quedaron en la normativa y que no nos favorecen tanto. Por ejemplo, no podríamos usar la marca Fintual en una AFP, porque uno tiene que usar una marca distinta para eso.
Ahí hay una barrera que hace más difícil entrar como nuevo actor. Pese a eso, valoramos y entendemos que la idea es que entren nuevos actores.
- ¿En qué momento van a tomar la decisión de si entran o no?
- Seguramente durante 2026 vamos a tener una respuesta. Queremos ser parte de la discusión desde nuestra posición, de un privado que está evaluando entrar al negocio.
Los planes de la firma para 2025
Dentro de los planes de Fintual para 2025 está ganar terreno a través de la filial Fintual prepago para facilitar las transacciones, lo que, a su vez, permitirá una mayor rapidez en los rescates que solicitan los clientes. Larré explicó que se trata de una cuenta de prepago que funciona de manera acotada a las inversiones. “El cliente va a tener una suerte de banco de inversión digital, donde van a poder tener una cuenta similar a una cuenta de débito que va a estar conectada al CCA de los bancos y van a poder invertir más fácil”, dijo.
Otro eje que concentra el trabajo de Fintual para 2025 es el desarrollo de su asistente de inteligencia artificial (IA). “Queremos hacer el mejor agente planificador financiero y asesor de habla hispana. Eso es bien difícil, pero tenemos esa ambición”, contó.
En México, en tanto, están lanzando Fintual Acciones, producto que ya existe en Chile y que permite a sus clientes invertir en EEUU, en papeles individuales y en ETF.