La Comisión Europea (CE) presentará
mañana su propuesta para reformar el sector de las agencias de
calificación de riesgo, que incluirá medidas restrictivas para
garantizar que estas compañías mantengan su independencia de las
entidades a las que deben evaluar.
La propuesta llega en medio de las críticas recibidas por estas
agencias en la actual crisis financiera, ya que no apreciaron
debidamente el alcance de los riesgos que asumieron muchas entidades
bancarias y financieras en la crisis de las "hipotecas basura"
estadounidenses.
Además, las agencias han sido acusadas de posibles conflictos de
intereses porque las entidades financieras cuya deuda deben
calificar les pagan también por sus servicios como consultores.
El comisario europeo de Mercado Interior, Charlie McCreevy,
presentará en conferencia de prensa las propuestas, una de las
cuales es garantizar que las agencias de calificación de riesgo no
incurran en esos potenciales conflictos de intereses.
Con ese fin, las agencias asignarán de forma rotatoria sus
analistas a las empresas, a fin de evitar relaciones personales de
larga duración que puedan afectar a la independencia de las
evaluaciones.
También se prevén cambios en la forma en que las agencias
conforman sus consejos de administración, a fin de garantizar la
presencia de algunos ejecutivos independientes.
Además, las agencias tendrán que registrarse a través del Comité
de Reguladores Bursátiles Europeos (CESR, en sus siglas en inglés),
un organismo consultivo independiente, según algunos detalles de la
propuesta que se han divulgado en los últimos días.
McCreevy, en una conferencia pronunciada en junio pasado, afirmó
que hacen falta reformas "limitadas pero bien dirigidas" para
acompañar a "una supervisión externa más firme" de las agencias de
calificación de riesgo.
La aprobación de la propuesta de mañana forma parte de una serie
de modificaciones presentadas por el Ejecutivo de la UE para
reformar el sistema financiero europeo, dentro de un plan lanzado
hace varios meses, antes del estallido de la crisis financiera
mundial.
El pasado 1 de octubre, la CE propuso endurecer las exigencias a
las entidades financieras para reforzar la estabilidad del sistema
europeo, con una propuesta para actualizar la directiva de
requisitos de capital, que regula los fondos que cada entidad debe
tener para cubrir sus riesgos.