El reciente brote del virus Síndrome Respiratorio de Medio Oriente (MERS, su sigla en inglés) en Corea del Sur podría tener un fuerte impacto sobre la economía local, razón por la cual el banco central decidió recortar las tasas de interés a su mínimo histórico.
Morgan Stanley advirtió esta semana en un informe que la enfermedad podría reducir en hasta 0,8 punto porcentual el crecimiento del PIB de la nación asiática.
"Creemos que el MERS está sucediendo en un mal momento para Corea porque la recuperación doméstica no ha ganado la suficiente confianza como para mostrar que es sostenible", escribieron los analistas Sharon Lam y Sung Woen Kang. Además, el brote afectará la temporada alta de turismo.
En el escenario base, los economistas asumen que la situación será contenida en un mes, período en que las ventas de retail caerían 10% y las ventas de los restaurantes declinarían 15%. El turismo descendería 20% en dos meses, porque tomará más tiempo que los visitantes regresen. Esto recortaría el PIB del segundo y el tercer trimestre en cerca de 0,5 punto y el PIB anual en 0,15 punto. Los expertos alertaron que el impacto podría ser mayor porque el análisis no incluye el efecto sobre la confianza.
Similar a 2003
En el escenario más pesimista, el brote se sale de control y se expande desde los hospitales al resto de la comunidad. "Si esto llegara a ocurrir, la recuperación doméstica podría descarrilarse completamente", acotaron. "Junto con la debilidad en las exportaciones, la economía coreana podría caer en recesión", advirtieron.
Si el virus es contenido después de tres meses, como sucedió con el virus SARS en Hong Kong en el año 2003, el banco prevé retrocesos de 20% en las ventas de retail, 30% en los restaurantes y 50% en turismo.
Esto rebajaría el PIB entre abril y septiembre en 3 puntos y el PIB anual en 0,8 punto. El efecto también podría ser mayor porque no se incluye el impacto sobre otros sectores como el inmobiliario y el de producción.
Las analistas de Bloomberg Deborah Aitken y Maja Rakic afirmaron que las ventas de bienes de lujo en el país podrían estancarse.
La nación "podría perder su fuente dominante de turismo si el gobierno de China sigue las alertas sanitarias ya emitidas por Japón y Hong Kong. En los doce meses a abril, Corea del Sur tuvo 15 millones de visitantes, con 45% provenientes de China", explicaron.
Japón y Europa podrían beneficiarse de la situación, ya que la debilidad de sus monedas podría atraer a los turistas que cambian sus planes de viaje.
La experta Catherine Lim adelantó que las ganancias de los retailers podrían desplomarse hasta 60% si el brote se prolonga por cuatro meses como lo hizo el SARS.
Estímulo monetario
La enfermedad, que hasta ahora deja 122 personas infectadas y diez fallecidos, obligó al Banco de Corea (BoK, su sigla en inglés) a recortar por cuarta vez en diez meses la tasa de recompra a siete días hasta 1,5%, su mínimo histórico.
"Si bien la deuda de los hogares ha sido una tema duradero que ha frenado el consumo, el MERS emergió recientemente como un riesgo inminente para el consumo", manifestó ayer el gobernador del banco central, Lee Ju Yeol.
Según la autoridad, el virus es ahora la variable más grande para la perspectiva de la cuarta mayor economía de Asia. Lee señaló la posibilidad de bajar el actual pronóstico de crecimiento de 3,1% en la actualización de julio.
"La rebaja apunta a suavizar el impacto negativo del MERS y a prevenir que la confianza del consumidor y la producción se paralicen", aseveró a Bloomberg Chang Jae Chul, economista de Citigroup. "El BoK está tratando de ser más preventivo en actuar esta vez que lo que fue después del accidente del ferry Sewol el año pasado", añadió.
JPMorgan, Citigroup y Australia & New Zealand Banking Group son algunas de las firmas que han modificado sus estimaciones para la política monetaria en las últimas semanas. Los bancos auguran un recorte en los tipos el próximo mes, lo que se compara con su proyección previa de que el organismo no cambiaría su postura en lo que queda del año.
Société Générale no descarta una tasa más baja y cree que el gobierno podría anunciar un presupuesto suplementario que contemple una reducción en la meta de ingresos y un aumento en el gasto fiscal.