A nueve meses de la larga huelga de más de 40 días, los trabajadores de Escondida iniciaron una nueva paralización.
Un día después que la empresa anunciara la desvinculación de 120 empleados, el Sindicato N°1 anunció que reaccionaron con un paro de 24 horas que comenzó a las 08:00 de esta mañana.
Además de los "despidos injustificados", los dirigentes acusan abusos y malos tratos.
A través de una declaración pública, los dirigentes explicaron que en horas de anoche, directivos del sindicato se reunieron con los ejecutivos Marcelo Castillo e Ifigenia Gioka, vicepresidentes de la compañía, a quienes se les formalizó la solicitud de corrección inmediata de lo que calificaron como una serie de incumplimientos e infracciones de Minera Escondida, como el relativo a las irregularidades del sistema de registro de asistencia, dispositivos que pueden afectar la salud de los trabajadores y abusos y malos tratos, "sin que hasta la fecha se haya dado respuesta satisfactoria", según explicaron.
Agregaron que el despido masivo de trabajadores anunciado ayer por la minera, se produce sin causa real ni legítima y es considerada como una práctica antisindical, de represalia tras el último proceso de negociación. En esa línea, denunciaron amedrentamiento frente a la próxima negociación.
"Los ejecutivos no asumieron compromiso alguno para resolver todas estas problemáticas, dándose por fracasada la reunión", comentaron en el documento.
Hasta el momento los trabajadores se mantienen en el campamento minero.
La paralización la está siguiendo el gobierno, particularmente el Ministerio del Trabajo.
"Se está monitoreando desde la región como corresponde y también señalar que los sindicatos han tomado la delantera en términos de llevar adelante reuniones con la empresa y decirle a los trabajadores que se verán vistos enfrentados a esta medida de la empresa, que la Dirección del Trabajo, a través de sus distintos funcionarios, los pueden debidamente orientar, proteger, a fin que se ejerzan las acciones correspondientes", dijo la ministra del ramo, Alejandra Krauss.