Industria

Dos tercios de las empresas IPSA bajan sus utilidades en el primer semestre presionadas por escenario económico

Entre los sectores afectados aparecen los commodities, el retail, el negocio bancario y el forestal. Analistas prevén que en la última recta del año podría empezar a verse un repunte.

Por: Equipo Empresas | Publicado: Viernes 8 de septiembre de 2023 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Los últimos años han sido un sube y baja para la mayoría de las empresas. La pandemia, la crisis logística, la invasión de Rusia a Ucrania, la inflación global, los bruscos aumentos de precio de las materias primas y los cierres de mercados de exportación son algunos de los factores que han provocado grandes desniveles en los desempeños del sector privado.

Y este 2023 está tendiendo a ser uno de ajustes, donde el escenario de contracción económica está afectando los resultados de las compañías chilenas.

Según una revisión realizada por Diario Financiero a los reportes realizados por las empresas IPSA (el indicador bursátil que busca medir el rendimiento de las 30 acciones de mayor tamaño del país) a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), al comparar el primer semestre del año con el mismo periodo de 2022, los ingresos de estas firmas se incrementaron un 9%, pero a pesar de ello, las utilidades cayeron en más de un 45%.

De hecho de las 30 firmas que componen el selectivo, dos tercios terminaron los seis primeros meses del año con caídas respecto al mismo periodo del 2022.

El segundo trimestre esta caída se hizo más patente. Según Aldo Morales, subgerente de Estudios Renta Variable en BICE Inversiones, entre abril y junio, las empresas IPSA reportaron una caída de un 32% en Ebitda. “A nivel agregado, los resultados estuvieron levemente bajo lo que esperábamos inicialmente”, dice.

Por su parte, Leonardo Vásquez, equity portfolio manager en Credicorp Capital, plantea que la actividad interna tocó fondo este semestre y que “gran parte de la caída de las utilidades del IPSA se explica por las empresas ligadas al sector exportador y financiero. Esto estuvo en línea con la caída de los precios de los commodities (bienes básicos), como los observados para la pulpa de celulosa, litio y hierro”.

Vásquez también alude al menor gap (brecha) de la UF observado desde el inicio del recorte de tasas del Banco Central para disminuir la inflación. En esa línea, afirma que la normalización de las tarifas navieras tras la pandemia también repercutió en los resultados de Vapores.

Por sectores

Morales afirma que Vapores, junto a las industrias forestal y bancaria explican la mayoría de la caída en las ganancias del IPSA.

Para él, los resultados también estuvieron bajo lo esperado, lo que respondería a los commodities, el retail financiero (Falabella y Ripley) y Enel Chile, que reportaron cifras menores a las que esperaba el mercado.

La industria del retail es una de las que más se ha visto golpeada por la contracción del consumo y el menor poder adquisitivo de los hogares.

Guillermo Araya, gerente de Estudio de Renta4, también destaca que el alto precio de los combustibles fue un factor que golpeó a los resultados de varios sectores.

Agrega que la inflación es otro tema que ha empujado los resultados a la baja. Por ejemplo, dice que esto ha incidido con fuerza en las empresas que tienen exposición a Argentina o, por otro lado, en compañías como las eléctricas, que ven afectados sus costos por el alto precio del dólar.

Entre las compañías con resultados positivos, los analistas destacan al sector sanitario, a los supermercados y a los centros comerciales. Respecto a estos últimos, Vásquez dice que “se ven niveles sanos de ocupación y aún existe espacio para volver a renegociar con los locatarios bajo condiciones normales”.

Cuota de optimismo

“En general creemos que el segundo semestre tendrá tendencias similares a nivel agregado porque las bases comparables siguen siendo altas para el IPSA a nivel agregado”, postula Morales.

Sin embargo, considera que se pueden empezar a ver recuperaciones en sectores como el retail (financiero y discrecional), sobre todo por las bajas de tasas que llevaría a cabo el Banco Central. “El sector eléctrico debería empezar a capturar el efecto de la baja de precios de combustible”, añade.

“El ciclo de baja de tasas que ya ha comenzado, puede servir como aliciente para una mejoría de la actividad interna que pueda repercutir de manera positiva en las compañías”, aventura Vásquez en la misma línea.

No obstante, advierte que el sector commodities se mantendrá presionado por los riesgos provenientes de China, aunque dice que se observa mayor estabilidad hacia adelante.

El negocio bancario: utilidades caen

En el caso de sus ganancias, solo hubo caídas: Banco de Chile bajó un 17% las ganancias; Santander un 50%, BCI un 15% e Itaú con 10,5%
Esta situación ha sido aludida principalmente a la desaceleración de la economía, que ha traído consecuencia para todos los bancos privados.
Datos de la CMF han evidenciado un aumento de casi un 15% en los gastos por pérdidas crediticias. Asimismo, el desempeño también se ha atribuido a un menor margen de intereses y reajustes; a una baja en los ingresos por comisiones netas; y a aumentos en los gastos operacionales e impuestos.
Hacia adelante, algunos analistas han señalado que el escenario para el sector bancario podría mantenerse complejo en lo que queda de 2023, sobre todo por las presiones sobre los gastos de provisiones.

El retail: la industria más golpeada por el menor consumo tras el fin del efecto retiros

El retail ha sido una de las industrias más afectadas. Tras una etapa de liquidez excesiva impulsada por los retiros de las AFP y las ayudas estatales, ahora las empresas sufren de la otra cara de la moneda, ante hogares con menor poder adquisitivo producto de la inflación.
En el IPSA, Falabella y Ripley ven caer sus ingresos y cierran el primer semestre con pérdidas. Cencosud, que tiene menos exposición al comercio discrecional y más a los supermercados –que son más resilientes ante el momento económico- sí subió sus ventas, pero de todos modos la hiperinflación argentina golpeó sus utilidades.
“Se sabía que el primer semestre era el más duro, sobre todo para el retail, porque se terminó el impulso por los retiros y bonos”, dice Araya, de Renta4. Sin embargo, afirma que los resultados estuvieron bajo lo esperado, a medida que las ventas se encaminan a una normalización tras el efecto retiros.
Los analistas ven que el recién empezado ciclo de bajas en la Tasa de Política Monetaria (TPM) podría levantar a la industria. “Los créditos estarán más bajos, lo que incentivaría al consumo para lo que queda de año”, señala Araya.
Vásquez, de Credicorp, concuerda con que este nuevo ciclo podría significar un repunte de la actividad interna y, por ende, del consumo. Además, complementa que, a pesar de estar desafiada, la industria “tiene una oportunidad única de eficientar sus negocios y alivianar sus estructuras”.

Lo más leído