Enel realiza inspecciones aéreas de sus redes de distribución eléctrica para prevenir "potenciales incidencias" de cara a eventos climáticos

En un complejo año para Enel Distribución debido a los extensos cortes de electricidad que se materializaron en agosto, que lo mantienen con un proceso de caducidad de su concesión de la Región Metropolitana en curso, la firma informó este martes que está realizando un plan de inspecciones aéreas para evaluar el estado de sus redes de distribución eléctrica de media y baja tensión y así relevar información que le permita tomar acciones preventivas y correctivas de cara al próximo invierno.

En un comunicado, el gerente de Operaciones de Enel Distribución, Víctor Balbontín, sostuvo: "Gracias a este tipo de monitoreo es posible alcanzar altos niveles de eficiencia y precisión en las tareas de mantenimiento de nuestra infraestructura eléctrica, a partir de termografías y modelamiento 3D de las redes con tecnología láser. Esperamos que esta acción contribuya a prevenir potenciales incidencias, sobre todo de cara a eventos climáticos”.

Según explicó la firma de capitales italianos, se trata de una acción de mantenimiento que se realiza con un helicóptero acondicionado especialmente con tecnología de última generación, que permite identificar los puntos de la red que requieren atención y así definir, por ejemplo, trabajos preventivos como el despeje de árboles que puedan afectar las líneas de distribución durante los próximos meses.

La compañía precisó que en total son cerca de 2.500 kilómetros de redes dentro de la zona de concesión de la empresa en la Región Metropolitana que serán inspeccionadas a través del uso de un helicóptero y drones de última generación "que permiten alcanzar altos niveles de eficiencia y precisión en las tareas de mantenimiento de la red eléctrica, con la mínima intervención al entorno para la recolección de datos".

A esto se suma -dijeron- "la obtención de registros del estado de la red mediante el empleo de tecnología de vanguardia", como sensores RGB, termográficos y LiDAR. Gracias a este último, la empresa puede identificar especies arbóreas que, debido a su altura y proximidad, podrían representar un peligro para la red eléctrica.

En concreto, este plan de inspección aérea se implementa en dos fases, donde la primera consiste en la inspección de 900 kilómetros de red y que será desarrollada durante de la primera quincena de diciembre, mientras que la segunda abarca la revisión de alrededor de 1.600 kilómetros adicionales y que terminará durante enero de 2025.