El incierto futuro del proyecto de voto telemático que aprobó el Senado

Una paradójica situación ocurrió el pasado miércoles 18 en el Congreso Nacional. En el contexto del rápido avance del coronavirus, lo que no descarta que en algún momento no se pueda seguir legislando de manera presencial en el Congreso, en su sesión de la mañana, la Cámara de Diputados puso en votación un proyecto que permitía el voto a distancia. Se rechazó. En la tarde de ese mismo día, el Senado terminó su sesión de Sala pasadas las 20 horas y tras aprobar, por unanimidad, otra moción con similar objetivo.

La moción ingresada el martes 17 a la Cámara modifica la Ley 18.918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional, para regular la aplicación de un sistema telemático de votación. Por ser ley orgánica, esta iniciativa requería un quórum de 4/7, es decir, el voto a favor de 89 de los 155 diputados. Sin embargo, fue rechazada en general al no alcanzar la cifra necesaria, sólo 83 diputados la aprobaron, 15 votaron en contra y 10 optaron por abstenerse. Por lo que sus autores deberán esperar a lo menos un año para presentar un proyecto sobre el mismo tema.

"Cuando se prevea el cierre temporal del edificio del Congreso Nacional, ya sea por impedimentos graves que pudieren poner en riesgo la vida o salud de diputados, senadores, funcionarios y trabajadores, o por medidas preventivas adoptadas por la autoridad sanitaria del país, se deberá habilitar un sistema telemático de votación que permita el desarrollo de la función parlamentaria a distancia", reza el proyecto.

Los rechazos y abstenciones fueron esencialmente de diputados del Frente Amplio, Partido Comunista, Federación Regionalista Verde Social y alguno que otro independiente de oposición. Como la moción era de un grupo de diputados de la UDI, este partido no se guardó las recriminaciones en contra de sus adversarios políticos y durante toda la jornada no desaprovecharon oportunidad para dejar en evidencia la actitud de quienes no dieron su aprobación a la moción.

Del Senado a paso firme

Unas seis horas más tarde, la Sala del Senado se aprestaba a votar un proyecto similar al anterior. Según consigna el texto de la moción presentada por el senador socialista Álvaro Elizalde e ingresada el mismo miércoles 18 sin urgencia, también pretende facilitar el voto de los parlamentarios, en caso de que la urgencia del avance de la infección impida al Congreso sesionar en forma presencial.

"Proyecto de reforma constitucional que autoriza al Congreso Nacional a sesionar por medios telemáticos en los casos que indica", reza el encabezado de la moción, que en su artículo único detalla que "si el Presidente de la República declarase un Estado de Excepción Constitucional, en conformidad a las disposiciones establecidas en los artículos 39 a 45, que impida a una o ambas cámaras del Congreso Nacional entrar en sesión y adoptar acuerdos, por la suspensión o restricción del derecho de reunión o de locomoción; la Cámara de Diputados y el Senado podrán sesionar por medios telemáticos. Dichas sesiones telemáticas deberán asegurar la fidelidad de la identidad de los participantes, la seguridad de las comunicaciones y el cumplimiento de los requisitos constitucionales y legales para la adopción de sus acuerdos".

Esta moción, corrió una suerte inversa a la de su símil de la Cámara. Fue aprobada por la unanimidad de los senadores presentes en la Sala a la hora de la votación: 33 votos a favor, ninguno en contra y tampoco hubo abstenciones.

Diferencias

Esta última moción será pasó de inmediato a la Sala de la Cámara para su segundo trámite. Es decir que esta instancia deberá pronunciarse sobre la materia en su sesión especial de la Sala este lunes 23. La incertidumbre es si tendrá el mismo destino que la iniciativa que esta semana ya rechazó esta instancia o salvará esta valla y llegará a destino. Considerando que cada día que pasa es más probable que sea necesario legislar a distancia. Al menos aquellas iniciativas con las que se intenta combatir los efectos del coronavirus.

Uno de los diputados de oposición que rechazó de plano la propuesta de sus pares de la UDI, fue el Presidente del partido Federación Regionalista Verde Social (FRVS), Jaime Mulet. El parlamentario explica que lo que lo hizo porque estima que la propuesta gremialista es "fundamentalmente antidemocrática".

Y se explaya aclarando que la califica así, "le entrega al presidente de la Cámara la facultad de poner en votación la agenda que él disponga; porque no se garantizan las atribuciones o facultades de las minorías y se limitan las facultades fiscalizadoras de la Cámara". Además, a Mulet le preocupa que no sea una norma transitoria, sino permanente.

Sin embargo, el lunes tendrá que votar el proyecto del Senado y con toda honestidad dice que "no le analizado qué haré; pero entiendo que esa moción mantiene el Congreso tal cual, solo que se podrá votar desde un lugar remoto. Pero no tengo el voto decidido aún, tengo que ver bien el proyecto", dice el diputado.

Ambos proyectos tienen algunas diferencias de fondo y de forma, pero pocas. Por lo pronto, los autores del proyecto de la Cámara son diputados de la UDI, el del Senado es de la autoría del senador socialista y timonel del PS, Álvaro Elizalde; el primero agrega un nuevo artículo 31 bis a la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional, mientras que la que se vota el lunes es una reforma constitucional que crea un artículo transitorio para este caso en particular, por lo que no toca otros aspectos del funcionamiento del Congreso.

Esa leve pero, aparentemente, significativa diferencia podría cambiar el destino del proyecto del senador en la Cámara y asegurar su aprobación, para que de ser necesario, el Poder Legislativo siga activo pese al coronavirus.