Alzas de impuestos que podrían afectar a la clase media será el punto de tope entre el Ejecutivo y la oposición por reforma tributaria

Tal como el ministro de Hacienda Mario Marcel ya había adelantado tanto al oficialismo como a la oposición, la reforma tributaria presentada oficialmente esta mañana de viernes, generó diversas reacciones que dan cuenta de que tendrá una difícil tramitación. Ello, porque la oposición mantiene su postura acerca de que el aumento de impuestos tendría un impacto negativo sobre la inversión y el crecimiento, en un contexto en que los mercados ya prevén una recesión; y, adicionalmente, les preocupa que –a su juicio- la propuesta tampoco tenga medidas para controlar la inflación.

Poco o nada cambió la mirada de la oposición respecto de la reforma tributaria –“pacto fiscal”, como lo denominó el presidente Gabriel Boric en su intervención- tras la presentación oficial que realizó el ministro Marcel, por lo que desde ya se prevé una compleja etapa de tramitación en el Congreso, considerando que en la Comisión de Hacienda del Senado, Chile Vamos es mayoría.

Por otro lado, es muy difícil que el gobierno pueda mantener la calendarización que propone para la tramitación de la reforma, ya que tanto desde la oposición como también el independiente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, Carlos Bianchi, señalan que es necesario un trabajo legislativo concienzudo. De hecho, este último advierte que “si el ministro (Marcel)m pretende que la entrega hoy día (viernes) de esta propuesta de reforma tributaria, es esta y no habrá ninguna indicación, ningún trabajo legislativo, se equivoca”.

En este cuadro, el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta, senador Juan Antonio Coloma (UDI), se mostró defraudado ante la propuesta tributaria del Ejecutivo, pues –desde su punto de vista- en ella no se aborda ninguna fórmula de control para el que sería uno de los principales problemas en la actualidad, como es la inflación: “Me da una sensación de vacío que eso no haya sido parte la intervención pública del ministro Marcel y el presidente Boric”.

“Noticia en desarrollo”

Sobre lo que sí contiene el proyecto, Coloma asegura que “es una noticia en desarrollo” y si bien dice empatizar con el objetivo de atraer recursos para el cambio que el gobierno espera realizar en materia de pensiones,  acusa que el costo de ese esfuerzo, “se lo está pidiendo, el gobierno, exclusivamente a los privados, a todos los profesionales, la clase media, los emprendedores”; y, en ese sentido, expresa su preocupación acerca de que el gobierno –a su juicio- no se estaría esforzando con los recursos del Estado, como por ejemplo, ahorrando o reasignando.

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En cuanto a los impuestos, Coloma advirtió que algunos afectan de manera significativa a los sectores medios, particularmente los que dicen relación con el arriendo. Por lo que espera ver los efectos que la propuesta tendrá en la inversión y el crecimiento”.

Mientras que el también integrante de Hacienda del Senado, José García Ruminot (RN), insistió en que "no es efectivo" que la reforma "vaya a afectar sólo al 3% de los contribuyentes y que el otro 97% no vaya a sufrir ninguna variación en su carga impositiva", por lo que añadió que "abarca a sectores de altos ingresos y también de clase media". 

Por lo que, a juicio del senador opositor, la parte más compleja de la tramitación será la referida al impuesto al patrimonio. Mientras que adelanta que habría coincidencias en materia de elusión, evasión y royalty minero, aunque esta mirada sobre el royalty no es del todo compartida por sus pares del sector.

En esta línea, el integrante de la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja, Frank Sauerbaum (RN), reiteró que es muy probable que existan coincidencia en materia de evasión, elusión, salvo en lo que se refiere a exenciones tributarias. En este aspecto, prevé “un avance rápido”. Sin embargo, adelanta diferencias –al igual que Coloma- en aquellas propuestas que contribuirían a disminuir la inversión, “porque gravar las rentas de capital, bajo cualquier circunstancia, disminuye los niveles de inversión”, por lo que pedirán al gobierno –adelantó- un detalle de los efectos de cada una de las normas relativas al alza de impuestos.

“Demasiado grande”

Ello, porque –a su juicio-, la tributaria no puede ser sólo una reforma recaudatoria, que no se haga cargo del escenario económico actual, pues tal como está podría generar un retroceso económico, “en vez de aumentar los niveles de prosperidad”.

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Otro de los integrantes de dicha instancia, el subjefe de la bancada de diputados de la UDI, Guillermo Ramírez, es categórico: “La reforma propuesta es demasiado grande”, sostiene. Y argumenta su conclusión, instando al gobierno a replantearse el objetivo de recaudar más de 4,1 puntos del PIB, “sobre todo por las malas expectativas de crecimiento e inversión que tiene Chile para los próximos años”.

Además, a juicio de Ramírez, “algunos instrumentos están mal pensados”, ya que en vez de subir la tasa de segunda categoría, se debería atacar el trabajo informal, argumenta, y plantea que aunque el gobierno anunciara que no subirá el impuesto a las grandes empresas, “el impuesto a las utilidades repartidas es un impuesto de primera categoría camuflado, porque quien soporta ambos impuestos es el mismo que debe tomar las decisiones de inversión”.

Por su parte, la integrante de la Comisión de Economía de la Cámara Baja, diputada Sofía Cid (RN), expresa su preocupación por el efecto del proyecto en materia de arriendos de propiedades y la restricción de deducción de gasto de créditos hipotecarios, “muchas familias de clase media han invertido sus ahorros en bienes raíces lo cuales se verán afectados”, reflexiona.