Tamara Agnic, presidenta de Chile Transparente: “Ojalá que no tengamos que esperar hasta el último WhatsApp para cambiar el sistema de nombramientos”
Afirmó que lo conocido del Caso Audios en la Corte Suprema “es muy grave”.
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Como “grave” calificó la presidenta de Chile Transparente, Tamara Agnic, el capítulo que se abrió en el Caso Audios a partir de los mensajes por chat que se conocieron este fin de semana entre el abogado Luis Hermosilla y la ahora suspendida ministra de la Corte Suprema, Ángela Vivanco.
A su juicio, el asunto se debe atender con celeridad, sobre todo porque hace tiempo había señales de que el sistema de nombramientos del Poder Judicial debía perfeccionarse.
“Es necesario que el sistema de nombramientos de autoridades clave, tanto en el ámbito judicial como en el político y económico, sea objeto de una revisión profunda”.
- ¿Qué le parece la situación generada por el Caso Audios en la Corte Suprema?
- Grave, porque mina muchísimo la confianza que debemos tener en uno de los pilares fundamentales de nuestra democracia, que es el Poder Judicial. La autonomía e independencia es un garante del equilibrio que debe existir con los otros poderes, por eso es tan grave.
- El Gobierno anunció cambios al sistema de nombramientos en el Poder Judicial. ¿Por dónde deben ir estos cambios?
-Las señales de que era necesario perfeccionar el sistema de nombramientos en el Poder Judicial vienen desde hace tiempo y ojalá que no tengamos que esperar hasta el último WhatsApp para cambiar el sistema de nombramientos.
Han existido ciertos cuestionamientos cuando tuvimos el caso del Fiscal Nacional en que llegan los candidatos, el Congreso desestima y hay toda una suerte de un juego de poderes que no le hace bien a la institucionalidad y al país.
Ya este último antecedente del Caso Audios es la guinda de la torta que deja en evidencia que necesitamos encontrar una fórmula.
- ¿Cuál es el camino?
- La receta mágica no existe. Aquí son los propios países los que debiesen encontrarla de acuerdo a sus propias dinámicas. Si uno lo analiza desde el punto de vista teórico, vemos que en el nombramiento de los jueces en el país participan los tres poderes y uno dice: “¡Qué fantástico!”. Pero, como se concibió el sistema, era que las audiencias públicas ante el Senado debían tener un valor real y no que se transformara en un trámite. Desde Chile Transparente creemos que debe ser un hito relevante, donde se interroga al postulante; esto amerita que lo tomemos más en serio.
- ¿Es relevante abordar esto con celeridad?
- Es necesario que el sistema de nombramientos de autoridades clave, tanto en el ámbito judicial como en el político y económico, sea objeto de una revisión profunda. Cargos como el del Fiscal Nacional, los consejeros de la Alta Dirección Pública (ADP), el Contralor General de la República y otros altos puestos de la administración del Estado no pueden seguir siendo espacios vulnerables a la opacidad. Esta falta de transparencia facilita que influencias indebidas se infiltren, poniendo en riesgo la integridad de la democracia y el Estado de Derecho. La reforma es urgente para asegurar procesos de designación basados en la probidad y la legitimidad institucional.
Y, por supuesto, es esencial que los nombramientos de quienes sostienen un pilar fundamental de la democracia, como es el Poder Judicial, también sean sometidos a una revisión exhaustiva.
La transparencia y el rigor en estos procesos son cruciales para garantizar que la justicia, como baluarte del Estado de Derecho, esté libre de cualquier tipo de influencia indebida. Solo así se puede fortalecer la confianza ciudadana en las instituciones y asegurar que el sistema judicial opere con imparcialidad y probidad, valores esenciales para el funcionamiento de una democracia sólida.
- Se espera también evitar el tráfico de influencias y conflictos de intereses…
- Claro, porque cuando le restas valor a las instancias que uno mismo ha construido en la letra de la norma y se tergiversa, por ejemplo, el para qué está la audiencia, terminan teniendo más valor esos espacios que son en la oscuridad, donde hay poca transparencia y empieza a pesar el amiguismo y la transacción. Y claro, aunque llegáramos a diseñar el mejor sistema teórico, si es que no nos ajustamos al espíritu de la norma, no vamos a sacar nada.
- A raíz de este y otros casos que hemos conocido, ¿cree que Chile es un país corrupto?
- Es difícil esta pregunta, porque cuando hablamos de corrupción tenemos que hablar de percepción de la corrupción, porque los hechos de corrupción no son necesariamente los que marcan que un país pueda ser conocido como más o menos corrupto, lo que marca es también el todo, el cómo funciona la institucionalidad y, en el último Índice de Percepción de la Corrupción de 2023 -dado a conocer en enero-, Chile también fue advertido de que existía este debilitamiento de la institucionalidad al percibir de que existía una justicia que funcionaba para algunos. Entonces, eso es lo preocupante y nuestro país siempre ha sabido actuar a tiempo, fortaleciendo las instancias democráticas, ese es el gran llamado, esto no es broma.
- ¿Cree que la ministra Ángela Vivanco debiera renunciar?
- Es difícil ponerse en el lugar de otro y no me corresponde, pero sí hay instancias institucionales que es necesario analizar y que están funcionando.