Exportaciones retomaron caídas en junio y las importaciones de bienes de capital extienden sus números rojos

El comercio exterior chileno se resintió al cierre del primer semestre.

A diferencia de lo ocurrido en los dos meses precedentes, las exportaciones chilenas totalizaron US$ 7.682 millones en junio, lo que se tradujo en una disminución de 1,4% respecto al mismo período del año anterior, de acuerdo con las últimas cifras publicadas por el Banco Central.

Las ventas al exterior fueron lideradas por la minería, que como sector tuvo ventas por US$ 4.668 millones y un leve aumento de 1,1% en 12 meses.

Durante el sexto mes del año, se realizaron compras al exterior por US$ 5.692 millones, un 10,3% más bajas que hace 12 meses.

El cobre se llevó la mayor parte, con envíos por US$ 4.097 millones y un incremento de 8%, anotando alzas tanto en los cátodos, como en los concentrados.

Sin embargo, el litio marcó un total de US$ 230 millones, lo que significó una baja de 45,3% en el mismo lapso.

El rubro agropecuario-silvícola y pesquero exportó US$ 399 millones, con una leve alza de 0,7%, en comparación con junio del año pasado.

La mayoría correspondió al sector frutícola, que embarcó US$ 315 millones al exterior, lo cual significó una baja de 1%, explicada por incrementos de 79,5% en las uvas, 490,5% en ciruelas, pero con una disminución de 99,8% en cerezas.

Las exportaciones del sector industrial bajaron 5,8% en el último año para alcanzar un monto de US$ 2.615 millones.

En este grupo los alimentos totalizaron ventas por US$ 1.060 millones, un 0,7% más alto que hace un año. Aquí las alzas de ventas en carne de ave y de cerdo contrastaron con descensos en trucha, salmón, merluza, fruta en conserva y fruta deshidratada.

Las bebidas y tabaco anotaron un retroceso de 15,6% y ventas por US$ 124 millones.

El gasto sigue en ajuste

Al igual que en mayo, las importaciones volvieron a anotar números rojos en junio. En el período se realizaron compras desde el exterior por US$ 5.692 millones, un 10,3% más bajas que hace 12 meses.

Las internaciones de bienes de consumo fueron de US$ 1.640 millones, lo cual corresponde a una disminución de 7,9%.

En este resultado influyó principalmente la categoría de los durables, de los que se importaron US$ 486 millones en el mes, lo que representó un descenso de 0,4%, incluidos menos computadores, televisores y celulares.

De todas maneras, se observó un aumento de 1,4% en los bienes semidurables, gracias al ítem de calzado.

Las adquisiciones de bienes intermedios sumaron US$ 3.195 millones y marcaron un descenso de 10,7%, explicado principalmente por una caída de los productos energéticos como gas natural licuado, el diésel y carbón mineral.

Los bienes de capital, que generalmente se asocian a la marcha de la inversión local -un tema que genera inquietud interna- siguieron de capa caída tal cual ha ocurrido desde octubre de 2022 y acusaron un retroceso de 11,2% para completar compras de US$ 1.302 millones. En este caso, hubo retrocesos en las adquisiciones de buses, maquinaria para la minería y la construcción y otros vehículos de transporte.

Dado estos resultados, la balanza comercial amplió el superávit a US$ 1.990 millones. Desde septiembre de 2022 que no se ven déficits.