El actual equipo político de La Moneda liderado por el ministro del Interior Jorge Burgos tiene una sola estrategia ante la investigación que hay entorno al ex ministro Rodrigo Peñailillo y las supuestas presiones que habría ejercido, a través de una funcionaria del ministerio de Hacienda, en contra del Servicio de Impuestos Internos (SII): no apoyar ni condenar a los ex ministros y dejar todo en manos de la Fiscalía.
Las presiones apuntarían, según la declaración emitida por el ex director del servicio Michel Jorratt ante el Ministerio Público, para que se frenara cualquier tipo de denuncia o querella contra SQM en el marco del caso Penta. Según la declaración divulgada ayer Jorrat señaló que "el ministro del Interior había dado la instrucción de que el SII no debía hacer nada más en relación a SQM."
Así, tanto Burgos como el ministro vocero de gobierno, Marcelo Díaz, dieron cuenta de la línea estratégica marcada desde que arribaron a La Moneda, en cuanto a que ellos se hacían cargo de lo que ocurriese desde que asumieron en sus puestos el pasado 11 de mayo, no respondiendo por hechos anteriores y descartando, hasta ahora, el inicio de algún tipo de investigación o sumario interno que vaya en paralelo al trabajo del Ministerio Público.
En ese sentido, el actual jefe de gabinete expresó, respecto a la posibilidad de que se levante una querella en contra de Peñailillo o Arenas que "eso está en manos del Ministerio Público, será el Ministerio Público el que decida eso y son cuestiones que a mí no me constan y mi llegada es muy posterior a los hechos". Y agregó que "aquí lo importante, como lo he dicho hasta la saciedad, es que las instituciones, que el Estado chileno, que la juridicidad chilena se ha dado, funcionen a cabalidad y con autonomía".
A su turno el vocero de gobierno y tras las constantes preguntas de la prensa aclaró que quien está viendo el tema es la Fiscalía y no el gobierno: "Aquí no hay que esconder los problemas bajo la alfombra, sino que hay que hacerse cargo" y a eso apunta "el trabajo de la fiscalía, de los Tribunales de Justicia" y también la Agenda de Probidad impulsada por el Ejecutivo", indicó ,evitando también expresar algún grado de responsabilidad de las actuales autoridades. Diaz justificó la postura del gobierno aduciendo que a esos hechos ocurrieron en el anterior gabinete.
El proceso judicial
Rodrigo Peñailillo declaró en completo sigilo el pasado 17 de junio en calidad de imputado para aclarar su vinculación con la empresa de Asesorías y Negocios SpA, que entregó boletas supuestamente ideológicamente falsas a SQM. En ese escenario, esta semana el Fiscal Nacional, Sabas Chauán, no descartó la posibilidad de pedir nuevas formalizaciones, entre ellas la de Peñailillo. Ahora, tras la denuncia de Jorratt podría apuntar hacia otros posibles delitos, como la obstrucción a la justicia. En este cuadro y a raíz de la declaración de Jorrat tampoco se descarta que la Fiscalía cite a comparecer al ex ministro Alberto Arenas.