Esta última semana el caso Penta tomó una velocidad vertiginosa, arrastrando a la UDI en este torbellino. Mientras la directiva no ha mostrado un diseño claro para enfrentar los embates, la inquietud en las filas gremialistas va en aumento y, de mantenerse el actual escenario, se ha hecho un crítico diagnóstico, que cada día suma nuevos adeptos: que hay que acotar los daños. Para ello sería necesario que algunos de los involucrados asuman la responsabilidad, inmolándose por el partido, y que el timonel gremialista, diputado Ernesto Silva, dé un paso al costado.
Por estos días el ambiente en la UDI se corta con cuchillo. Cuando estalló el caso nadie imaginaba las consecuencias que podría acarrear para la colectividad y por añadidura para la directiva, pero a estas alturas a algunos se les hace cada vez más difícil aceptar el diseño de la mesa para intentar sortear los efectos de la arista política del caso Penta. Y si bien aún no pasan a la etapa en que representantes históricos de la tienda critiquen públicamente la conducción de Silva, en las filas gremialistas no se habla de otra cosa.
En este contexto es que un grupo de influyentes gremialistas, preocupados por el curso de los acontecimientos, estaría buscando una fórmula para reemplazar en la presidencia de la UDI a Silva. La idea sería que este proceso fuera lo más rápido posible para poder cerrar el capítulo al interior del partido. El principal objetivo que habría detrás, sería poder generar un escenario propicio para intentar buscar una salida política al problema, muy al estilo de lo sucedido el año 2003 a raíz del escándalo MOP-Gate que afectó a la Concertación.
Interlocutor válido
Conscientes de que, hasta ahora, La Moneda no ha mostrado ninguna disposición al diálogo en este aspecto, quienes respaldan esta opción esgrimen que es necesario un interlocutor válido con el que el gobierno acepte sentarse a conversar. Un personaje respetado que dé garantía de que cuenta con el apoyo del partido y, adicionalmente, no tenga ninguna relación con los hechos que provocaron la crisis interna.
Así es como habrían surgido un par de nombres: el del senador Hernán Larraín y el del ex ministro del Interior y primo hermano de Sebastián Piñera, Andrés Chadwick, otro de los coroneles de la tienda.
Los más críticos de la forma cómo ha actuado Silva en el manejo de esta crisis estiman que no es posible que el timonel pueda analizar el problema con imparcialidad para darle una solución que beneficie al partido. Ello, porque tienen la convicción de que el joven presidente gremialista "es parte del problema" debido a su cercana relación con los controladores de Penta y el ex subsecretario de Minería Pablo Wagner. Pero también a otros de los mencionados en la arista política de la investigación, como es el caso del ex senador Jovino Novoa y la senadora Ena von Baer.
Sólo a partir de un proceso como éste, cree un sector de la UDI, se podría hacer la pérdida y descomprimir el ambiente. Porque hacia adelante se viene una etapa complicada, advierte un consejero del partido que así grafica su preocupación: "cómo seguir conquistando los votos sin la billetera que teníamos antes". Porque en la colectividad tienen la convicción de que los aportes serán cada vez más escasos.
Novoa se retira de estudio jurídico y Von Baer es reemplazada en Educación
Aumentando la tensión que ya existe interior de la UDI y la inquietud acerca del futuro del ex timonel Jovino Novoa, este jueves se conoció que el ex senador decidió retirarse del estudio jurídico Guerrero, Olivos, Novoa y Errázuriz. Así fue dado a conocer a través de un comunicado que sostiene que "en el día de ayer (miércoles), y haciendo uso del derecho de los socios de retirarse el año que cumplen 70 años establecido en los estatutos de Guerrero Olivos, don Jovino Novoa Vásquez comunicó a los socios su retiro del estudio a contar de esta fecha".
Si bien en el anuncio no se alude a la investigación de que está siendo objeto el coronel gremialista, se produce sólo un día después de que el senador Iván Moreira reconociera su responsabilidad en las "irregularidades" en el financiamiento de su campaña. Y en medio de fuertes presiones al interior del partido por separar la institucionalidad de los actos de algunos de sus militantes.
Mientras tanto la senadora Ena von Baer sigue ausentándose del Congreso sin una comunicación oficial respecto de tal inasistencia. Este jueves la reemplazó el jefe de la comité gremialista, senador Hernán Larraín, pero sólo de manera informal hasta ahora.
En la UDI se comenta que la parlamentaria se encuentra en Valdivia, zona que representa en el Congreso, pero no se entregan más detalles de su situación.