Motores

Porsche Cayman, la curva como estilo de vida

El bólido tiene 275 CV, y alcanza los 264 km/h de velocidad punta. Acelera de 0 a 100 km/h en 5,4 segundos.

Por: Expansión, España. | Publicado: Jueves 11 de abril de 2013 a las 08:20 hrs.
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El Cayman ha dejado de ser el Porsche 'pobre' para convertirse en un digno heredero de su hermano mayor el 911. Continúa eso sí siendo un biplaza, lo que le permite contar con dos espacios razonables de carga, uno delante bajo el capó de 150 litros y otro en la parte posterior,, dentro del habitáculo detrás de los respaldos delanteros entre la bandeja y la luneta trasera.

Sus formas son más musculosas y más angulosas, lo que aumenta su tronío. Crece la batalla en 6 centímetros y se pega al suelo 1 centímetro más con respecto a la generación anterior. Todo ello sólo creciendo apenas 3 centímetros en longitud. También ha aumentado el ancho de vía delantero cuatro centímetros para mejorar el trazado de las curvas.

Las dos versiones Cayman y Cayman S se diferencian estéticamente en que en la parte delantera el S tiene unas tomas de aire y todo el paragolpes en el color de la carrocería y en la parte trasera cuenta con una doble salida de escape. Además, las dos versiones cuentan con unas llantas específicas.

Ambas cuentan con un spoiler trasero que se acciona de forma automática a partir de 120 km/h y que también se puede accionar de forma manual. En esta generación, dicho alerón cuenta con una inclinación mayor que la que tenía su predecesor y que la que tiene su hermano el Boxter.

El Cayman está construido en aluminio y distintas aleaciones de aceros y boro que le confieren una mayor rigidez torsional (+ 40%) y que reducen el peso en hasta 30 kilos con la anterior generación. El Cayman pesa 1.310 kilos por los 1.320 de la versión S. Estos pesos, según Porsche, son más de 100 kilos más ligeros que sus rivales entre los que se encuentran el Audi TT, el Mercedes Benz SLK o el BMW Z4.

Habitáculo heredado
El habitáculo recuerda las nuevas generaciones de Porsche. De hecho, la columna central donde se encastra la pantalla táctil, los mandos de las funciones de audio, el navegador, el climatizador, la palanca de cambios, y los posibles modos de conducción es prácticamente idéntica a la del 911.

El puesto de conducción es cómodo y el acceso tampoco es complicado. El volante es distinto según las versiones. El Cayman cuenta con un volante con las levas situadas detrás, bastante incómodas y que son solidarias con el volante, la izquierda baja marchas y la derecha las sube.

En el Cayman S en cambio, las levas van incrustadas en el propio volante. Hay dos, a izquierda y derecha, y también son solidarias con el giro del volante. Sin embargo, cada una de ellas puede subir y bajar marchas. Esta opción es más cómoda porque no se pega con los dedos en la palanca del intermitente o del control de velocidad de crucero, por ejemplo cuando se usan las levas.

Motor central
El Cayman se caracteriza por la situación central del motor. Esto le confiere un reparto de pesos de un 46% en el eje delantero y de un 54% en el trasero. Reparto casi equilibrado que mejora la manejabilidad del auto y lo hace más ágil.

Porsche incorpora a este modelo el motor de seis cilindros boxer cuya cilindrada es de 3,4 litros. La firma alemana ha conseguido potenciar esta mecánica al mismo tiempo que consigue mejorar su eficiencia.

El Cayman gana 10 caballos hasta los 275 CV, y alcanza los 264 km/h de velocidad punta. Acelera de 0 a 100 km/h en 5,4 segundos y homologa un consumo de 7,7 litros (1,4 litros menos que la generación anterior), lo que le lleva a emitir 180 gramos de CO2.

El Cayman S gana 5 caballos para alcanzar los 325 CV. Llega a 281 km/h de máxima y acelera de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos. Esta versión homologa un consumo de 8 l/100 km, lo que supone una reducción de 1,4 litros con el anterior Cayman S y emite 188 gramos de CO2 por kilómetro.

La mayor eficiencia de estos motores a pesar de su ganancia de potencia viene derivada de la introducción del sistema de arranque y parada automáticas en las detenciones, la recuperación eléctrica en las frenadas, una mejora en la gestión térmica del motor para que alcance antes su temperatura óptima, la dirección electromecánica y los soportes dinámicos de la transmisión cuya fricción es menor.

Y un factor determinante en el menor consumo que también hereda del 911, es la navegación a vela. Es un sistema a través del cual, al circular por autovía a una velocidad más o menos constante, motor y transmisión simulan una especie de punto muerto donde el propulsor gira a un régimen mínimo de 600 revoluciones (el Cayman llega a 8.000 vueltas) con el consiguiente ahorro de combustible. Este sistema es automático, funciona con el cambio manual de siete velocidades o con el automático PDK también de siete relaciones.

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