Solo el 9% de los directivos afirma que su empresa tiene un marco ético para el desarrollo de la IA
Según un estudio del ESE Business School y PwC Chile, un 73% de las compañías encuestadas ha integrado la inteligencia artificial en sus operaciones.
Por: I. Ramos y H. Díaz | Publicado: Jueves 14 de noviembre de 2024 a las 04:00 hrs.
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Un 73% de las empresas ha integrado la inteligencia artificial en sus operaciones, pero solo el 9% de sus directivos afirma que su organización tiene un marco ético para el uso responsable de la IA.
Estas fueron las principales conclusiones del primer Estudio de Inteligencia Artificial Responsable, realizado por el Centro Ética y Sostenibilidad Empresarial del ESE Business School, de la Universidad de los Andes, y PwC Chile. Para su desarrollo, se sondeó a altos ejecutivos y directores de empresas con presencia en Chile.
“La adopción de la inteligencia artificial avanza, pero su uso responsable aún es incipiente, con amplio espacio de desarrollo ético”, aseguró en la presentación del informe el Director del Centro de Ética Empresarial, Álvaro Pezoa.
Un 67% de los encuestados afirmó que en su empresa no hay un enfoque formal para identificar riesgos en el uso de la IA.
Por su parte, el socio líder de Consultoría de PwC Chile, Federico Morello, explicó que este estudio es la versión local de un reporte publicado por la Big Four a nivel internacional en 2018.
“En un momento en que la IA está impactando en el entorno, es clave que las decisiones alrededor de su implementación consideren tanto el impacto en la sociedad como el respeto a los principios éticos”, afirmó.
Panorama de la IA
En términos generales, solo un 5% de los directivos entrevistados dijo que la IA ha sido integrada totalmente en su empresa, un 27% en forma experimental y un 41% que se está explorando. Además, un 49% de los directivos declaró que hay inversión prevista en IA para los próximos 12 meses.
Sin embargo, un 67% afirmó que en su empresa no hay un enfoque formal para identificar riesgos en el uso de la IA, y el 66% reconoció que no hay políticas respecto a la aplicación de principios éticos o no poseen prácticas éticas ni principios formales.
Según los encuestados, los principales beneficios de la IA son las mejoras en los procesos, la reducción de costos y el time to market. “El uso de estas nuevas tecnologías puede ser un factor relevante para el mejoramiento productivo en Chile”, planteó el estudio.
En contraste, los principales riesgos son la privacidad de la información, información falsa, ciberseguridad y sesgos del modelo o algoritmo.
A pesar de esto, la mayoría de los encuestados afirmó que en su compañía no hay un enfoque formal para la identificación de riesgos en el uso de la IA. Solo un 13% sostuvo que existen políticas y estrategias para hacer frente a los riesgos.
Ante la pregunta de quién debiese establecer los límites éticos en el uso de la IA en las empresas, un 41% de los altos directivos expresó que debe regularse por ley o similar, y un 40% estimó que debería hacerlo cada organización en particular.
“Las empresas con mayor integración ética en IA optan por la autorregulación, mientras que las que tienen menos avances prefieren contar con regulación legal, sugiriendo un debate pendiente en esta área”, especificó Pezoa.