El porcentaje de titulares de hipotecas
en EE.UU. que no pueden cumplir con los pagos mensuales subió a una
cifra récord del 6,99% en el tercer trimestre del año, informó hoy
la Asociación de Banca Hipotecaria (MBA, por su sigla en inglés).
Ese registro, que alude a titulares que están retrasados en al
menos un pago de la hipoteca, representa un incremento de 0,58 puntos porcentuales respecto del segundo trimestre y de 1,4 respecto
de igual periodo en el año anterior.
El porcentaje de hipotecas en proceso de ejecución también se
situó en cifras récord en el último trimestre y llegó a representar
el 2,97% del total, lo que supone un alza del 0,22% respecto del
trimestre anterior y del 1,28% frente a igual periodo en 2007.
En el tercer trimestre se iniciaron acciones de ejecución para un
1,07% de los préstamos hipotecarios del país, un punto básico menos
que en el trimestre anterior, pero un 0,29% superior respecto de
hace un año.
La entidad destacó en un comunicado de prensa el incremento en el
número de casos en los que el retraso en el pago de la cuota mensual
era de tres meses o más, sobre todo en California y Florida.
El economista jefe de MBA, Jay Brinckmann, explicó que en veinte
estados de EE.UU. se percibió un descenso entre el segundo y el
tercer trimestre en la tasa de ejecución de hipotecas.
Sin embargo, en todos los estados, a excepción de Alaska,
aumentaron los casos en los que el impago de las cuotas mensuales
superaba los tres meses.
"No hemos entrado en recesiones anteriores con un mercado de
vivienda tan débil como ahora, con lo que es probable que un
porcentaje más alto de préstamos impagados, a causa de pérdidas de
empleo, entren en ejecución", señaló Brinckmann.
Explicó que el trimestre pasado se iniciaron 575.000 ejecuciones
de hipotecas, unas 5.000 menos que en el trimestre anterior, aunque
el ritmo que se observa hace prever que este año podría terminar con
unos 2,2 millones de préstamos en fase de ejecución.
"Sin una recesión, el número en 2009 probablemente habría bajado
en varios cientos de miles, pero los efectos de la pérdida de empleo
y el deterioro económico generalizado hacen que el pronostico para
el próximo año sea peor, particularmente si los problemas
hipotecarios se extienden más", sostuvo.